Bizkaia pugna de nuevo con el Gobierno al ordenar paralizar las obras
La Diputación defiende que los trabajos se han iniciado "sin atenerse a la normativa"
La Diputación de Bizkaia ha ordenado la paralización de las obras de la antigua fábrica de armas Astra, en Gernika. Según aseguró ayer Juan María Aburto, los trabajos se han iniciado “sin atenerse a la normativa”. El portavoz foral explícó que el edificio se encuentra protegido como “conjunto monumental afecto al Camino de Santiago”, lo que “obliga” a presentar ante la institución provincial, “competente para custodiar el bien patrimonial”, el proyecto de obra y a obtener “la conformidad o, en su caso, las medidas correctoras”.
La decisión supone otro capítulo más del prolongado enfrentamiento que mantiene la Diputación, en manos del PNV, con el Gobierno vasco desde la llegada de los socialistas a Ajuria Enea en 2009.
El Ejecutivo impulsó en la antigua factoría, en colaboración con el Ayuntamiento de Gernika, propietario del inmueble, el proyecto cultural Fábricas de Creación, para el que ha destinado 1,5 millones de euros. La aspiración es que, una vez remozado, el viejo edificio se convierta en un polo de atracción para los artistas del municipio y alrededores. Serán 1.600 metros cuadrados repartidos en tres plantas, con un espacio de exposiciones, un taller de producción, una sala de conciertos, espectáculos de danza y teatro, y un taller de expresión corporal. José María Gorroño, alcalde de Gernika, anunció también su intención de habilitar en el inmueble, obra del arquitecto Ricardo Bastida, un espacio para la formación profesional en nuevas tecnologías, para lo que ya había iniciado conversaciones con el departamento de Educación del Gobierno vasco.
El edificio está protegido como "conjunto monumental afecto al Camino de Santiago"
La apertura estaba prevista para después de este verano, pero la actuación de la Diputación podría provocar retrasos. Aburto recordó que el Ejecutivo inició en julio de 2010 el expediente de calificación de la fábrica como bien protegido, y que éste fue resuelto en febrero de este año.
La institución foral realizó el 12 marzo una inspección en la factoría y comprobó que se estaban realizando trabajos. A continuación, ordenó su paralización y solicitó al Ayuntamiento el proyecto de obra. Aunque el Consistorio les envió un informe sobre la obra en marcha, no la detuvo. Este “incumplimiento” se comprobó en otra inspección el día 23. Ante esto, la Diputación envió ayer mismo al Ayuntamiento “un requerimiento” en el que se le ordena que cumpla la paralización de los trabajos. “Tiene la obligación de preservar el patrimonio cultural”, dijo Aburto.
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