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El futuro de la Obra Social de la CAM, en tierra de nadie

Los políticos se muestran apáticos frente al ardor con el que defendían su influencia en la extinta caja

Oficina central de la CAM en Alicante.
Oficina central de la CAM en Alicante.PEPE OLIVARES

El hundimiento de la CAM ha dejado restos del otrora buque insignia de las finanzas alicantinas diseminados a lo largo y ancho de la provincia. Los de mayor relevancia son el voluminoso y valioso patrimonio histórico-artístico de Obra Social. Convertidos los antiguos gestores en ejemplo de derroche y vendido el Banco CAM, o mejor dicho subastado por un euro, los políticos que con tanto ardor defendieron sus cuotas de poder en los órganos decisorios de la caja alicantina, porque nombraban a sus representantes y condicionaban su estrategia inversora, ahora callan.

Ocho meses después de la intervención de la CAM por parte del Banco de España ya no se oyen ni los ecos en defensa de lo que queda de la caja de ahorros y de su Obra Social. Y aunque muchos no lo recuerden, la CAM todavía existe. Emplea a unas 40 personas y aglutina un patrimonio de casi 200 millones, unas cuotas participativas sin valor actual y una oficina en Miami, pendiente de los permisos correspondientes de EE UU.

"La ha dejado caer

El futuro del negocio financiero de la CAM es ahora cosa de su nuevo dueño, el Banco de Sabadell. Pero el devenir de la Obra Social pasa ineluctablemente por la creación de una fundación, cuyo impulso está en manos del poder alicantino. Los dos grandes partidos, el PP, hegemónico en el poder político provincial, y el PSPV, primera fuerza de la oposición, no se han desgañitado hasta ahora en defensa de ese legado. Desde las filas populares rechazan esa opinión y aseveran que, entre bastidores, están realizando gestiones. El bando socialista asume que, quizás, ha estado más preocupado por desenmascarar a los responsables de la caída de la caja, aunque remarca su compromiso por mantener y reforzar el papel de la obra social.

La situación de la Obra Social de la CAM, que llegó a disponer en los años de bonanza de 70 millones de euros en presupuesto, dispondrá este año de poco más de 16 millones. El FROB ha garantizado los fondos para este cometido hasta 2015, procedentes del remanente existente y de un ahorro de costes. No hay otra fuente de ingresos. Pero los fondos para la Obra Social tradicionalmente procedían de un porcentaje de los beneficios. Ahora, el presupuesto lo cifra el FROB para mantener el personal y las instalaciones que siguen en marcha. El ámbito de actuación de la Obra Social ha quedado reducido a la Comunidad Valenciana y a Murcia.

No falta quien recuerda que no hay obligación de dotar la Obra Social pero tampoco faltan voces que lamentan la ausencia de líneas estratégicas en las actuaciones previstas. Hay más preguntas que respuestas. ¿De qué manera seguirá la Obra Social? ¿Por qué no se empieza a hablar de la fundación? se preguntan exconsejeros de la entidad.

La obra social aglutina un

“La ha dejado caer todo el mundo, la sociedad civil y todo el mundo”, lamenta un exconsejero. “Nadie se mete en esto porque lo dan por perdido”, agrega la misma fuente. “Hay desconocimiento y temor a salir salpicado”, señala otra fuente de la antigua caja. Esta fuente recuerda que las entidades fundadoras de la CAM son la Diputación de Alicante, la Diputación de Valencia y el Círculo Católico de Torrent. Ninguna ha reivindicado con fuerza integrarse en la futura fundación.

La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo, del PP, rechaza que haya estado pasiva al defender la Obra Social de la caja. “No es cierto que no estemos haciendo nada. No va a desaparecer y llevamos meses trabajando a todos los niveles para que se mantenga esa labor”, asevera. “Lo que está claro es que el futuro pasa por la creación de la fundación, que corresponde al Banco de España y me han asegurado que en ningún momento se cuestiona su continuidad”, añade.

Fuentes oficiales de la Diputación de Alicante, aseguran que su titular, la popular Luisa Pastor, tampoco es ajena al devenir de la Obra Social. “Los contactos y las reuniones con los actuales responsables son continuos, porque somos plenamente conscientes del valor de la obra social”, aseguran esas fuentes. No obstante, fue la propia Pastor la que con una frase lapidaria resumió mejor que nadie la resignación de los políticos al fin de la andadura de la CAM: “Entre todos la mataron y ella sola se murió”, afirmó tras la intervención.

Ana Barceló, secretaria general del PSPV de la provincia de Alicante, reconoce que, quizás, el partido ha estado más preocupado y ocupado en “esclarecer quiénes han sido los responsables de los desmanes y despilfarro que llevaron a la intervención de la caja”. “La comisión de investigación de las Cortes es clave para ello”, añade. Y a renglón seguido, la dirigente socialista insiste en que el partido no se olvida de la Obra Social: “Hay un patrimonio valiosísimo que conservar y seguir poniendo en valor”.

Barceló valora el patrimonio histórico-artístico de la Obra Social, con la casa Museo Azorín de Monòver, la Modernista de Novelda y las tres aulas de cultura, como estandartes, y recuerda su papel solidario, medioambiental y en Investigación y Desarrollo.

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