Dorantes derriba fronteras

Cuando Dorantes se encerró en su estudio para grabar Sin muros!, una invitación a "derribar las barreras entre los pueblos, el arte y los corazones", no podía imaginarse que el espíritu y el título de su tercer disco le iba a venir como anillo al dedo para el acto al que ha sido invitado la próxima semana y al que asistirá también el Rey.

 El pianista flamenco actuará en la reinauguración de la Plaza de España en Mostar, en la que se ha levantado un obelisco en memoria de los 23 militares españoles fallecidos en Bosnia-Herzegovina durante los 18 años (1992-2010) que las tropas españolas han estado en misión de paz en la zona. En la Spanski trg, que había sido bombardeada durante la contienda y que se ha rehabilitado gracias a una aportación del Gobierno español de 300.000 euros, sonará la música, también sin fronteras, de David Peña Dorantes con una formación de sexteto y el baile de Manuela Ríos.

Sin muros!, la pieza que da título al álbum, es una bulería instrumental; pero en el disco han colaborado una larga lista de cantaores: Esperanza Fernández, Carmen Linares, Arcángel, Miguel Poveda, José Mercé y el desaparecido Enrique Morente, quien realizó aquí una de sus últimas grabaciones, unos tientos. El disco, editado por Universal Music y en el que también colabora la cantante israelí Noa, saldrá al mercado el 8 de mayo.

El sevillano presenta 'Sin muros!', su tercer disco

"El cante son pinceladas en los temas. Son palos y letras tradicionales, pero yo me los llevo a mi terreno a base de instrumentación y arreglos", explicó ayer en otra Plaza de España, en este caso de Sevilla. Dorantes (Lebrija, Sevilla, 1969) es el único artista en toda la existencia de la Bienal de Flamenco de Sevilla que consiguió tres Giraldillos con un solo espectáculo. Fue en 2002 cuando presentó Sur en el Real Alcázar, una actuación que le supuso los Giraldillos a la mejor música original, al mejor solista y al mejor espectáculo. Este último galardón fue concedido por los espectadores.

"Creo que este disco es más flamenco que los anteriores, aunque más atrevido en lo armónico y en la composición. Podemos decir que, aunque no deja de ser flamenco, roza lo contemporáneo", puntualiza el artista, quien se ganó al difícil público del flamenco en 1998 con el innovador Orobroy, su primer álbum, que también se convirtió en espectáculo. Desde entonces Dorantes no ha parado de ofrecer conciertos por todo el mundo y de compartir experiencias con otros músicos. "Nunca he actuado en Sarajevo, pero sí en Rumanía y en Bulgaria, donde hice una gira con Theodossi Spassov, un músico búlgaro que toca el kaval (flauta de los Balcanes) y que es allí como Paco de Lucía en España", comenta Dorantes mirando la Plaza de España sevillana y preguntándose cómo será su homónima en Mostar.

"Dentro de mi escala de valores grabar discos no es lo primero. Por delante están el directo y tocar con otros músicos que me enriquezcan, por eso nunca encuentro el momento para meterme en el estudio", apunta Dorantes, quien, entre sus nuevas 11 composiciones, ha incluido Errante, un tema inspirado en los sonidos de los costaleros del Cristo de los Gitanos en su salida de Semana Santa. Además, esta obra le ha llevado a otra y, por primera vez, ha compuesto una marcha procesional para banda que le ha regalado a la hermandad sevillana y que se estrenará esta Madrugá al paso del Cristo por La Campana.