PSE y PP impiden que la Cámara pida reducir las Fuerzas de Seguridad

La mayoría de PSE y PP, con el añadido del voto de UPyD, impidió ayer que el Parlamento aprobara una iniciativa de Aralar, luego suavizada por un acuerdo con el PNV, para que se empiece a estudiar la reducción de los efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

Lo que salió finalmente fue una enmienda socialista, que el PP apoyó, y por la que el Parlamento se limitó a reconocer y agradecer la labor desarrollada en la lucha contra el terrorismo de ETA” y a reiterar la solidaridad a las familias de los asesinados por la banda.

En realidad, y a tenor de parte del discurso que realizó su portavoz, José Antonio Pastor, el PSE podría haber respaldado prácticamente el texto final de Aralar y PNV. En él se instaba a los gobiernos vasco y central a iniciar conversaciones en la Junta de Seguridad para “reducir” los efectivos de Guardia Civil y Cuerpo Nacional de Policía, de modo que su presencia “se ajuste a lo previsto en el artículo 17 del Estatuto”, que define el carácter integral de la Ertzaintza. Todo ello motivado en “la desaparición de la violencia de ETA”.

Adecuación

Así como el PP se opuso de modo frontal a contemplar cualquier cambio —ETA no ha desaparecido, y los nacionalistas buscaban un “desmantelamiento inspirado en el viejo “que se vayan”, adujo su portavoz, Nerea Llanos, entre otros argumentos— el PSE admitió que la consolidación de la nueva situación traerá consigo necesariamente una “adecuación” de los efectivos. El PNV los cifró en 4.500 agentes, entre Guardia Civil y Policía Nacional. Añadidos a los 8.000 de la Ertzaintza darían muy por encima de la media europea y española, argumentó el parlamentario de Aralar, Dani Maeztu.

Aunque Maeztu quiso plantear el debate en términos “técnicos”, tanto el PP como el PSE coincidieron en que, lo mismo que al PNV, “se les nota” que “les molestan”. “Y parte de la nueva situación debe ser también que ustedes acepten que seguirán teniendo funciones en Euskadi y que les miren igual que miran a un ertzaina”, les dijo Pastor.

El peneuvista Mikel Martínez advirtió al PP de que la cosa caerá por su propio peso y a su gobierno le tocará gestionar la reducción: Ante el resto de España, “no podrán justificar que mantiene aquí a 4.500 personas sin hacer nada”, dijo.