_
_
_
_
_

El aplauso de Jesús Eguiguren y un cúmulo de miradas hacia Manchester

Solo el presidente del PSE, Jesús Eguiguren, se salió ayer de la sobriedad que caracteriza al Parlamento vasco y aplaudió ayer tras el discurso del lehendakari, Patxi López. Esta normalidad en la bancada contrastó con la amplia actividad en los pasillos, más parecida a la del pleno de política general que se celebra a finales de septiembre pasado como pistoletazo de salida al curso político.

Cerca de un centenar de periodistas cubrieron el debate en el que el lehendakari difundió sus propuestas para la convivencia tras el cese definitivo de ETA y que se prolongó durante cerca de cuatro horas. A lo largo de la mañana fueron habituales los corrillos y las reuniones entre portavoces para tratar de cerrar un acuerdo de la ponencia que finalmente Aralar aplazaría.

A última hora de la mañana, la sala de prensa se quedó pequeña para la comparecencia de la portavoz de la izquierda abertzale, Maribí Ugarteburu. Su presencia allí junto a al parlamentario de EA, Juanjo Aguirrezabal —necesaria según el Reglamento de la Cámara, que obliga a que todas las comparecencias en ese lugar estén justificadas con la participación de parlamentarios— se solapó con el segundo turno de los grupos.

No solo acudieron periodistas, sino también Dani Maeztu, el único de los cuatro parlamentarios de Aralar que se ha mostrado de acuerdo con la opción de concurrir en las próximas autonómicas en coalición con la izquierda abertzale, quien se mantuvo en un discreto segundo plano. También el parlamentario penevista Kerman Orbegozo se acercó a escuchar a la portavoz abertzale.

El vuelo de Ortuzar

A pesar de la expectación de la jornada, el efecto Manchester traspaso los muros del Parlamento. Este se pudo palpar en las conversaciones de la cafetería de la Cámara, pero también en algunas ausencias. Como la del peneuvista Andoni Ortuzar, quien antes de que finalizara el debate de las propuestas del lehendakari dejaba la Cámara para coger el último vuelo chárter de Madrid a Manchester para animar in situ al Athletic en su choque europeo.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Con las miradas de media Euskadi en la pantalla de la televisión para ver el partido de fútbol, el Parlamento guardaba silencio a última hora de ayer. Exactamente a esa hora del Día de la Mujer, doce horas después de que el lehendakari comenzara su discurso ensalzando el avance en materia de igualdad, seis periodistas, todas ellas mujeres, seguían trabajando en el Parlamento.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_