Gobierno López: catálogo de incumplimientos

El programa electoral del PSE-EE para las Elecciones Autonómicas del 1 de marzo de 2009 está todavía disponible en el escaparate de su propia web. En dos palabras es un “catálogo de incumplimientos”. Un documento transparente que evidencia el desgobierno al que el pacto PSE-PP ha conducido a nuestro país durante estos tres últimos años. Está claro que el “cambio” propuesto se ha producido, pero ha sido a peor, hacia atrás, ha sido el “cambio del cangrejo”. Salta a la vista que los compromisos adoptados han sido incumplidos y que no se han puesto en marcha iniciativas alternativas.

He querido seleccionar tres frases literales de este programa que resumen el ideario con que el PSE-EE y Patxi López llegaron al Gobierno. Los tres compromisos incumplidos que ejemplifican a la perfección el completo agotamiento de este Gobierno.

“Más progreso y más bienestar"

Esta era la gran promesa del PSE-EE hace tres años. Comprometían, con su vehemencia habitual, que su Gobierno iba a “resolver los problemas reales de la gente”. Es evidente que la gente tiene hoy, en Euskadi, más problemas reales que entonces. Hoy, el problema del paro es más real, hay 50.000 personas más en paro que hace tres años. El problema del endeudamiento es más real, porque el Gobierno se ha hipotecado y este año tiene que pagar un millón de euros cada día para hacer frente a la deuda que ha contraído. Las listas de espera o los colapsos en las urgencias de Osakidetza, los problemas de la supresión de servicios en el Metro o los recortes en la administración se han incrementado, son hoy problemas más reales que hace tres años. El problema real hoy es que tenemos un Gobierno que fomenta el déficit, que gasta más de lo que tiene, que gastó cada día del pasado año cuatro millones de euros más de lo que tenía.

Hoy, en Euskadi, está claro que con este Gobierno PSE-PP tenemos “menos progreso y menos bienestar”. Lo único real es que se han incrementado los problemas reales de la gente.

"Un ciclo sin revanchismos"

Otra enfática expresión recogida del programa del PSE-EE. Un ciclo “sin revanchismo”, ¡que se lo pregunten a Joseba Azkarraga! Han pasado tres años y los hechos revelan el espíritu de un Gobierno que acusa al anterior consejero de Justicia de “fraude y graves irregularidades” en contratos realizados hasta 2009 por 23 millones de euros, para que un día después el lehendakari los catalogue como meras “incidencias administrativas”.

El Gobierno López ha abierto un ciclo de cuestionamiento permanente en Osakidetza, en la política cultural, en la acción exterior, en la gestión de transportes. El Gobierno cuestiona el propio entramado institucional de Euskadi. Un sistema que ha funcionado, pero que al lehendakari no le gusta, un sistema que critica pero ante el que se muestra incapaz de plantear una alternativa.

El Gobierno López ha iniciado un ciclo en el que denuncia duplicidades en la administración pero no las resuelve, afirma que los Ayuntamientos requieren más financiación pero no aprueba la Ley Municipal, cuestiona la lucha contra el fraude fiscal o la capacidad recaudatoria de las Diputaciones forales. Nos encontramos ante el Gobierno del cuestionamiento permanente del sistema, sin plantear nunca alternativas para mejorarlo. Un Gobierno capaz, eso si, de incumplir al 90% su propio calendario legislativo y capaz de no ofrecer ninguna razón que lo justifique.

"Diálogo entre diferentes para unir el país"

La misma noche del 1 de marzo de 2009, el PSE-EE rompió este compromiso de “diálogo” y decidió aliarse con el PP para impedir que el ganador de las Elecciones pudiera realizar un planteamiento de gobierno. Han pasado tres años y los hechos corroboran la hipótesis de que aquella alianza PSE-PP estaba ya sellada de forma previa al veredicto de las urnas. Ambos partidos no fueron capaces de superar la frustración de su derrota en 2001 y optaron por “perfeccionar la estrategia”, ilegalizaron la izquierda abertzale y sumaron sus fuerzas para desplazar al nacionalismo democrático del Gobierno vasco.

No ha habido durante tres años la más mínima voluntad de poner en marcha el “diálogo entre diferentes”. Hoy nos encontramos con la prueba más evidente, la izquierda abertzale, a través de Bildu y Amaiur, cuenta con representación en todos los foros parlamentarios menos en uno, el Parlamento vasco. Si el compromiso de “unir el país a través del diálogo entre diferentes” fuera real, el PSE-EE y el PP abrirían el Parlamento a todas las fuerzas, de forma que Euskadi iniciara desde el diálogo entre todos este nuevo ciclo político sin la violencia del terrorismo. Pero el PSE-EE y el PP no lo hacen. No quieren hacerlo y el Euskobarómetro nos ha dado la razón. Ambos partidos saben que no cuentan con la confianza de los ciudadanos, saben que no tienen ninguna oportunidad de formar Gobierno. Se mantienen en el Gobierno vasco con el objetivo exclusivo con el que llegaron: el poder por el poder.

El Partido Nacionalista Vasco (PNV) reitera, una vez más, que cada día que pasa es un día perdido por este Gobierno. Reiteramos nuestra disposición al acuerdo entre todos, un acuerdo a la altura de las circunstancias históricas que nos ha tocado vivir. Tenemos la obligación de responder juntos a la grave situación económica que nos atenaza. Y tenemos la obligación de aprovechar la oportunidad de normalización política que se nos presenta. Cada día podemos hacerlo, cada día podemos acordarlo, solo hace falta que el Gobierno asuma su responsabilidad y responda. Solo hace falta que se abra al diálogo y plantee propuestas constructivas. Si lo hace, encontrará la colaboración de un Partido Nacionalista Vasco comprometido siempre con el presente y el futuro de Euskadi.

Andoni Ortuzar, presidente del BBB de EAJ-PNV.