Barberá pagará cinco veces más cara una expropiación a la familia Cotino

Los retrasos se pagan, y caros. El Ayuntamiento de Valencia deberá pagar cinco veces más caros unos terrenos expropiados en 1998 a una sociedad de la familia del presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino. “La negligencia en la gestión de Urbanismo costará a las arcas municipales 4,2 millones de euros”, denunció este martes el portavoz socialista en Valencia, Vicent Sarrià.

El concejal socialista detalló cómo una expropiación forzosa de suelo rústico, en 1998, que debía costarle al Consistorio 687.527 euros, acaba valiendo 3,5 millones de euros, más otro millón en intereses de demora, según los cálculos socialistas.

El Ayuntamiento de Valencia aprobó en 1998 expropiar 140 parcelas (unos 300.000 metros cuadrados) de terrenos de huerta en Campanar para desarrollar el Parque de Cabecera, donde se ubica el Bioparc. A uno de los expropiados, la mercantil Alquería Dolores, propiedad de la familia del presidente de las Cortes Valencianas, Juan Cotino, el Ayuntamiento ofreció (y abonó) 148.206 euros por sus parcelas, pero la firma recurrió la valoración ante el Jurado Provincial de Expropiaciones (JPE), que propuso en mayo de 2005 un justiprecio de 687.527 euros.

El Consistorio no recurrió y, descontado lo ya pagado, aceptó pagarle a esta mercantil propiedad de Vicente Cotino 539.311 euros. El arquitecto municipal aceptó este precio pero el expediente se guardó en un cajón, criticó Sarrià.

La propiedad dejó pasar los dos años que marca la ley para la retasación y hasta julio de 2008 “no recordó al Ayuntamiento que le había pedido verbalmente varias veces que estaba dispuesta a cobrar de forma fragmentada”. La propuesta de pago llegó a la Junta de Gobierno y se confirmó la disponibilidad de fondo en febrero de 2009. Un mes después, la mercantil de Cotino recordó al Ayuntamiento que seguía sin cobrar y en mayo solicitó la retasación de estos terrenos, que pasaron de rústicos a urbanizados. El Consistorio intentó pagar, “pero era tarde”, resumió Sarrià. La nueva retasación valoró la expropiación en 3,5 millones de euros, cinco veces superior a la cantidad establecida en 2005, es decir, los 687.517 euros. El Consistorio recurrió.

Los socialistas calificaron en 2010 de escandaloso el procedimiento y solicitaron la creación de una comisión de investigación que aclarara las expropiaciones por retasación. El Gobierno local de Barberá se negó con el argumento de que habían recurrido la última valoración porque la consideraban excesiva. El Tribunal Superior de Justicia ha ratificado los 3,5 millones de euros, pues los terrenos rústicos no valen lo mismo que unos suelos dotados de servicios. Y otro dato: de los 140 expedientes de expropiación relacionados con el Parque, solo se han dado sobrecostes, denunció Sarrià, en las expropiaciones a la familia Cotino y a los Trénor.

Preguntado por el caso, un portavoz oficial del Consistorio dijo ayer que el Ayuntamiento ha tratado de defender el interés general. “Son cuestiones muy técnicas, no políticas”, aseguró.