Figar: "Hará que los colegios menos demandados se pongan las pilas"
“¿Cómo nos pone a competir sin iguales medios?”, dice el portavoz de los directores de secundaria La consejera afirma que retirar el temario de las oposiciones a docente “beneficia” a los aspirantes
El nuevo sistema para elegir colegios, a juicio de la Consejería de Educación y Empleo, no solo eliminará la “picaresca” y “dará más libertad a las familias” para elegir centro, sino que también conseguirá que los centros menos demandados “se pongan las pilas”. Es lo que ha señalado la consejera Lucía Figar para defender el cambio de criterios que comenzará a aplicarse en abril para el curso que viene y que supone, a medio plazo, eliminar la puntuación que las familias tenían por residir o trabajar cerca del centro elegido. La oposición y los sindicatos CC OO y UGT han criticado este nuevo modelo porque consideran que crea guetos y aumenta las desigualdades.
Educación defiende, también con este modelo de admisión, que los centros deben competir entre sí. Desde 2005, el Gobierno regional realiza una prueba externa a los alumnos de 6º de Primaria y desde hace cuatro años, en 3º de la ESO. Aunque el examen es obligatorio, no condiciona el paso de curso ni consta en el expediente. La Consejería facilita las notas de los centros a las familias como un elemento más para elegir colegio. Los detractores de esta idea (federación de padres, oposición, sindicatos y asociaciones de directores) piden que no se conozcan las notas porque la prueba no tiene en cuenta condicionantes externos como el nivel socioeconómico de los alumnos o la diversidad en las aulas.
En una entrevista en El Círculo en Telemadrid, la consejera ha indicado que ya hay centros que son los menos solicitados sin que aún se haya implantado la zona única y que "ocurrirá siempre" porque "siempre va a haber colegios muy demandados, los preferidos por las familias y otros que sean menos demandados".
Para la consejera, está "muy bien que la Consejería de Educación sepa precisamente cuáles son esos colegios más demandados para tratar de ampliarlos y replicarlos y cuáles son los colegios que no quiere nadie". La responsable de Educación añade que ahora las familias "están atrapadas en su barrio" (aunque, según estimaciones oficiales, el 80% de los padres eligen el colegio con un criterio de proximidad). Según Figar, “todo esto mejora la libertad de elección pero también la calidad, porque introduce mayor competencia entre los centros educativos y eso hace que suba el nivel".
“¿Cómo se puede pedir a los centros públicos que compitan con los privados cuando la Administración ha reducido las plantillas de profesores y nos deja sin programas de atención al alumnado?”, critica José Antonio Martínez, presidente de Adimad, la asociación de directores de secundaria de Madrid. Este curso comenzó con nuevos recortes tras la aprobación de las instrucciones de inicio de curso que aumentaron la jornada y redujeron el número de interinos.
“El nuevo baremo está basado en el principio de la libre competencia, pero falla porque hunde a los centros públicos”, añade. Para Martínez, cambiar los criterios de admisión supone “una vuelta de tuerca a la enseñanza pública en favor de la concertada”. El representante de Adimad añade: “No nos negamos a mejorar las cosas pero no podemos hacerlo con unos recortes que nos han dejado con una mano delante y otra detrás”.
Figar también ha opinado sobre el cambio de temario para las oposiciones a docente que el Ministerio de Educación publicó en el Boletín Oficial del Estado el martes sin previo aviso. La consejera ha acusado al Gobierno socialista de hacer lo mismo cuando modificó los temarios en noviembre y estima que el cambio afectará "a los que hayan decidido presentarse en diciembre a las oposiciones de junio, que no es lo habitual, ya que la mayoría de opositores llevan años estudiando, con lo que les beneficiará que se haya retirado el temario del 18 de noviembre”.
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