El juez prevé aprobar el plan de liquidación de Spanair en septiembre

Los más de 3.200 acreedores de Spanair podrían empezar disponer de un calendario para cobrar sus deudas, en caso de haber suficientes activos para saldarlas, a partir del mes de septiembre, cuando el titular del Juzgado de lo Mercantil número 10 de Barcelona, Juan Manuel de Castro, prevé aprobar el plan de liquidación de la aerolínea. Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), los acreedores de la compañía ya pueden mandar a los administradores concursales, del despacho Gispert de Barcelona, las reclamaciones de sus deudas. El juez prevé, además, resolver el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) en el plazo de un mes para que los trabajadores puedan dirigirse al Fondo de Garantías Salariales (Fogasa) y solicitar el subsidio de paro a finales de marzo. Spanair presentó el concurso voluntario con un pasivo declarado de 474 millones de euros y un activo de 126 millones.

En un comunicado, el TSJC ha explicado que los acreedores ya pueden comunicar las cantidades que la compañía les debe a través de la administración concursal, a pesar de que normalmente este periodo arranca tras la publicación del concurso en el Bolentín Oficial del Estado (BOE). Para ello, los acreedores deberán mandar sus datos (datos de identidad y del crédito acreditados por documentos originales o legitimados ante notario) a los administradores. Una página web tiene modelos de estas cartas de comunicación.

Los administradores concursales tienen dos meses para elaborar un informe que valore los bienes y derechos de la compañía y ordene los acreedores según su prioridad o privilegio de cobro. Puesto que el concurso es complejo dado el volumen de acreedores y trabajadores afectados (más de 2.600), los administradores podrían alargar ese periodo dos meses más. En todo caso , el informe definitivo deberá estar acabado a lo sumo a principios de octubre. A la vez, los administradores también deberán presentar un plan de liquidación que el juez podría aprobar en septiembre de 2012, cuando los acreedores ya podrán saber de forma más fiable si podrán recuperar sus deudas y cuándo podrán hacerlo. Una vez acabado este último paso, el juez estudiará las posibles responsabilidades en la actuación de los administradores de la compañía por si estos agravaron o provocaron la insolvencia de Spanair.