Vecinos de Alicante consideran una "miseria" la revisión del bono-oro

El Gobierno del Ayuntamiento de Alicante, presidido por Sonia Castedo, del PP, hizo valer ayer en el pleno su mayoría absoluta para sacar adelante el presupuesto para 2012. El PP se quedó sólo a la hora de refrendar el documento, que recoge recortes importantes del gasto, especialmente a los funcionarios, pensionistas, partidas rurales, entidades vecinales, culturales y juveniles. Los populares achacaron el recorte a la merma de ingresos “por culpa de la nefasta gestión de la crisis del Gobierno de Zapatero”, precisó el edil de Hacienda, Juan Seva.

La oposición votó en contra. Manuela Celdrán, portavoz de 10 asociaciones de vecinos, subió al estrado para exigir a la regidora que pare la subida del transporte público. Castedo sólo se comprometió a revisar al alza el bono-oro de los pensionistas. “Es una miseria”, replicó Celdrán.

El presupuesto asciende a 240 millones, una merma del 11% respecto al anterior. La deuda, según el equipo Gobierno, es de 169 millones. La oposición eleva esa cifra a los 200 millones al añadir facturas pendientes de pago de los ejercicios de 2010 y 2011.

La propuesta de presupuesto que el PP llevó al pleno recogía una autoenmienda previa para incluir el ingreso extra por la subida de IBI, cifrado en 8,3 millones. Este ingreso se ha incorporado bajo el epígrafe de "imprevistos y funciones no clasificadas". Seva aseguró que parte de dinero se destinara a paliar los recortes a dos colectivos: los funcionarios y los pensionistas. A los primeros se les mantendrá la paga extra que, inicialmente, se les había quitado; y a los segundo se les aumentará de 12 a 25 el número de viajes del bono-oro. Sendos compromisos tienen que ser aprobados en el pleno.

Martín: "Ustedes llevan en el Gobierno local desde 1995,

El PP rechazó las enmiendas de la oposición. Seva defendió así presupuesto: “Es el mejor presupuesto posible. Es cierto que ha habido recortes, pero estos no afectan a los servicios municipales básicos”.

La portavoz del Grupo Municipal Socialista, Elena Martín, discrepó de Seva y aseguró que la asfixia de las arcas del Consistorio se debe a la "política de despilfarro y descontrol del gasto de la Generalitat Valenciana y del propio Gobierno local". “Ustedes llevan en el Gobierno local desde 1995, por tanto, son herederos de su desastrosa gestión", añadió.

El portavoz de EU, Miguel Ángel Pavón, rechazó el documento por considerar que "antepone los beneficios de los grandes contratistas del Ayuntamiento como la concesionaria de la basura [en manos del empresario Enrique Ortiz] a los derechos de los ciudadanos".

El edil de UPyD, Fernando Llopis, echó en cara al PP que el presupuesto carece de un plan de inversiones.