FGC dejará bajo mínimos el tren Lleida-La Pobla

La Generalitat de Cataluña, que asumió en enero de 2005 la línea férrea entre Lleida y La Pobla de Segur con la promesa de modernizarla y potenciarla, ha anunciado que la dejará bajo mínimos para ahorrarse un millón de euros. Los alcaldes del territorio se oponen a que la frecuencia de trenes se reduzca a la mitad como propone Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC), la empresa pública que explota el servicio,

Enric Ticó, presidente de FGC, ha explicado, después de reunirse con los alcaldes y presidentes de los consejos comarcales afectados, que razones económicas obligan a reorganizar el servicio, de manera que circularán la mitad de los trenes entre Lleida y Balaguer, y solo uno entre Lleida y La Pobla de Segur. En la actualidad hay ocho de ida y vuelta en el primer tramo, y tres que hacen todo el recorrido.

La medida se aplicará a partir del 1 de febrero y con ella se pretende ahorrar un millón de euros,  cantidad que coincide con lo que dejará de aportar la Generalitat a esta línea en los presupuestos de 2012. Mantener este servicio le cuesta ahora al Gobierno catalán 3,1 millones de euros anuales, de los cuales 2,5 van a parar a Renfe.

“Tenemos la sensación de que tiramos el dinero a la basura”, ha manifestado Ticó. “No puede ser que mantengamos este sistema caro, mal operado e ineficiente". Asimismo ha asegurado que esta línea es más deficitaria que otras que también se han reajustado porque tiene un sistema de funcionamiento anticuado y Renfe no ha aplicado las nuevas tecnologías en control y seguridad.

La ocupación media de los trenes entre Lleida y Balaguer es del 8,3%, y entre Lleida y La Pobla, del 3,9%, lo que para la Generalitat representa un coste de 46,9 euros por viajero. La línea tuvo 228.000 usuarios en 2011, 8.000 menos que el año anterior.

La Generalitat tiene la intención de sustituir a Renfe como operador de la línea por un tipo de explotación mixta similar a la del tranvía de Barcelona. Pero antes de sacar a concurso la gestión tendrá que adquirir trenes especiales adaptados al ancho de vía ibérico. Esos trenes deberían construirse expresamente para esta línea.

Ticó niega que la Generalitat tenga intención de privatizar o cerrar la línea del tren de La Pobla, ya que de lo contrario no continuaría invirtiendo en mejoras. “Pensamos que podemos sacarle más rendimiento y potenciar aún más el tren de los lagos como producto turístico”, ha señalado.