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Un juez del Supremo de EE UU defiende su comparación entre sodomía y asesinato

Antonin Scalia se encontraba en la Universidad de Princeton presentando un libro

Foto de archivo del juez Scalia durante una charla en Chicago el pasado mes de octubre.
Foto de archivo del juez Scalia durante una charla en Chicago el pasado mes de octubre.Charles Rex Arbogast (AP)

Un juez del Tribunal Supremo de Estados Unidos, Antonin Scalia, defendió públicamente afirmaciones pasadas en las que ha comparado las leyes que prohíben la sodomía con las que penalizan el asesinato. Las palabras de Scalia, uno de los magistrados conservadores de la corte, llegaron apenas tres días después de que la máxima instancia judicial del país aceptara estudiar dos casos relacionados con el matrimonio homosexual.

“No creo que sea necesario, pero pienso que es efectivo”, afirmó Scalia durante un evento en la Universidad de Princeton, según ha informado la agencia Associated Press. El juez realizó esta afirmación ante la pregunta de un estudiante sobre por qué comparaba las leyes que prohíben la sodomía con las que prohíben el asesinato, ante lo que contestó que se refería a la prohibición en sí, no a lo que censuran. Scalia defendió además el poder del Tribunal para prohibir aquellos actos que consideren ‘inmorales’.

“Es una forma de argumento legal que se llama 'reducción a lo absurdo'. Si no podemos tener sentimientos morales contra la homosexualidad, ¿podemos seguir teniéndolos contra el asesinato? ¿Podemos tenerlos ante otras cosas?”, comentó el juez. Scalia después insistió al dirigirse al estudiante que había formulado la pregunta. “Me sorprende que no te haya convencido”.

El juez ha demostrado su rechazo a los derechos de los homosexuales en dos sentencias previas del Tribunal Supremo. En 1996, escribió en contra de la decisión que abolió la prohibición de aplicar leyes que protegían a los gais y lesbianas en caso de discriminación. En 2003, se opuso a la sentencia que declaró inconstitucionales las leyes que hasta entonces prohibían la sodomía en Tejas.

En 2013, la corte deberá pronunciarse sobre la constitucionalidad de la ley de Defensa del Matrimonio (DOMA), que desde 1996 establece que está limitado a la unión entre un hombre y una mujer. Desde entonces, DOMA ha impedido el reconocimiento a nivel federal de las parejas homosexuales que se han casado en los estados donde las uniones gais sí han sido legalizadas. Varias de esas parejas recurrieron a la justicia para reivindicar su derecho a la igualdad, que consideran que ha sido violado por esta ley, y dos de esos casos fueron admitidos el pasado viernes por los nueve jueces del Tribunal Supremo.

Scalia es uno de los jueces más conservadores del Tribunal y tanto en sus opiniones como en las sesiones en las que los magistrados escuchan a las partes implicadas en los casos legales, sus preguntas suelen convertirse en protagonistas. Este lunes, el juez se refirió una vez más a la Constitución de Estados Unidos y rechazó la idea de algunos teóricos, que lo tratan, según él, “como un texto vivo” que se adapta a la evolución del país. “Pero no es un texto vivo, está muerto, muerto, muerto. Mi Constitución es muy flexible, no hay nada en ella sobre aborto, eso depende de los ciudadanos... Lo mismo con la pena de muerte”.

La llegada de los casos sobre matrimonio homosexual al Tribunal Supremo ha sido interpretada por muchos como un movimiento natural por parte de la corte ante el cambio de opinión que han demostrado los ciudadanos ante este asunto. Según un estudio reciente de la Universidad George Washington, revelado el pasado domingo, el 40% de los estadounidenses considera que las parejas del mismo sexo deberían tener derecho a casarse. Otro 30% afirma que debían tener acceso a las uniones civiles pero no al matrimonio, mientras que un 24% asegura que no se les debería permitir ningún tipo de unión.

El pasado mes de mayo, Obama se convirtió en el primer presidente que daba su apoyo a la legalidad del matrimonio homosexual, reflejando el cambio de tendencia que ha tenido lugar en todo el país y que el Tribunal Supremo puede ratificar con una sentencia favorable el próximo mes de junio.

Decenas de organizaciones piden a Obama que espere al Supremo

Cristina F. Pereda

Más de 50 organizaciones por los derechos de los inmigrantes y de los homosexuales firmaron una carta enviada este fin de semana a la Casa Blanca y en la que se solicita a Obama que congele todos los casos de deportación o de entrega de ‘green cards’ a las parejas homosexuales extranjeras de ciudadanos gais.

La ley DOMA, al prohibir el reconocimiento de los matrimonios homosexuales a nivel federal, también impide que estadounidenses casados con un extranjero soliciten un permiso de residencia para ellos, como sí ocurre en el caso de las parejas heterosexuales.

Cinco parejas en esta situación -entre ellas una ciudadana española- han demandado al Gobierno de Estados Unidos que, a pesar de rechazar la aplicación de DOMA en los tribunales y de anunciar medidas discrecionales para impedir la expulsión de personas en esta circunstancia, sigue negando estos permisos de residencia.

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