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SECUESTRO

Pakistán "descarta" que el periodista secuestrado haya sido asesinado

'The Wall Street Journal' cree que su corresponsal todavía está vivo

El ministro del Interior de la provincia paquistaní de Sindh, Mujtar Sheij, ha descartado hoy que el periodista estadounidense Daniel Pearl, desaparecido en Pakistán, esté muerto, como anunciaba un mensaje enviado ayer por correo electrónico a diversos medios de comunicación de EE UU.

Mientras tanto, la policía paquistaní continúa investigando las dos pistas contradictorias sobre el destino del periodista del diario The Wall Street Journal secuestrado en ese país el pasado 23 de enero.

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Al periódico estadounidense llegó ayer un correo electrónico con el anuncio de la ejecución de Daniel Pearl pero, casi al mismo tiempo, el consulado de EE UU en Pakistán recibío una llamada que imponía un nuevo ultimátum para liberarle. Así, la policía rastrea los cementerios locales en busca del cuerpo del periodista.

El diario estadounidense ha afirmado hoy que cree que su corresponsal esta aún vivo.

"En base a las informaciones que hemos recibido desde Pakistán creemos que los mensajes recibidos ayer (viernes) sobre Danny son falsos. Continuamos creyendo que Danny esta vivo", ha afirmado el diario en un comunicado de prensa hecho público hoy.

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El correo electrónico, llegado también a la redacción de otros medios estadounidenses, asegura que el cadáver del periodista había que buscarlo ya "en las tumbas de Karachi", la localidad donde desapareció.

La llamada telefónica, que la policía considera creible, fijaba un nuevo ultimátum de 36 horas, y exigía dos millones de dólares (2,35 millones de euros) y la liberación del ex embajador talibán en Pakistán, Abdul Salaam.

En comunicaciones anteriores, los secuestradores ya habían solicitado la excarcelación de Salaam, además de una mejora en las condiciones de los prisioneros talibanes y de Al Qaeda en Guantánamo, pero la petición de un rescate es una novedad.

Desde un cibercafé

La policía no ha podido confirmar aún la veracidad de ninguno de los dos mensajes, aunque ha expresado ya sus dudas respecto a ambos. Sin embargo, los agentes han iniciado la búsqueda del cuerpo de Pearl en los cementerios de Karachi, como indicaba el correo electrónico.

Anoche, la policía registró una apartamento de esta ciudad y se incautó de un ordenador desde el que supuestamente se enviaron dos de los correos electrónicos recibidos en los últimos cinco días sobre el destino de Pearl. Los agentes creen que los otros dos correos, los primeros enviados, provienen de un cibercafé.

Daniel Pearl, de 38 años, fue secuestrado el 23 de enero en Karachi después de tomar un taxi para dirigirse a un restaurante en el que unos individuos le habían prometido que podría entrevistar al líder de una secta musulmán marginal.

En su primer correo, los captores amenazaban: "Os damos un día más. Si América no atiende nuestros requisitos, mataremos a Daniel. Después, este ciclo continuará y ningún periodista americano podrá entrar en Pakistán. Que nadie piense que esto es el final. Los americanos tendrán lo que se merecen. Esto es el comienzo y es una guerra real contra los americanos".

Entre 400 tumbas

Además, acusaron a Pearl de ser un agente de la CIA, lo que han negado tanto la agencia estadounidense como su periódico. El Secretario de Estado, Colin Powell, rechazó el jueves mantener cualquier negociación con los secuestradores: "No vamos ni a atender ni a negociar sus demandas".

En un segundo correo, enviado el miércoles, los secuestradores ampliaban su plazo de 24 horas un día más, al igual que luego hicieron en el tercero, mandado el jueves.

Ahora, mientras se esperan nuevas noticias de los criminales, la policía ha iniciado el rastreo de las cerca de 400 tumbas de los cementerios de Karachi. Los agentes han comenzado su labor por la zona sur de la ciudad, donde vivía Pearl junto con su mujer, de origen francés y embarazada del primer hijo de la pareja.

Agentes paquistíes rastrean el cementerio cristiano de Karachi en busca del cuerpo de Pearl.
Agentes paquistíes rastrean el cementerio cristiano de Karachi en busca del cuerpo de Pearl.REUTERS

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