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ESTO LO DEBERÍA CANTAR SINATRA
Columna
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El cerdo

¿No es privilegio del opresor salir volando cuando le dé la gana?

Jordi Soler

Hay un refrán en inglés que se aplica cuando algo tiene pocas posibilidades de suceder: when pigs fly: eso sucederá cuando los cerdos vuelen. Curiosamente uno de los cerdos más famosos de la iconografía del siglo XX es uno que vuela, ese que aparece en el álbum Animals (1977), de Pink Floyd. Aquel famoso ejemplar era un cerdo hinchable, del tamaño de un autocar, que fabricó la empresa Goodyear-zepellin a petición expresa de Roger Waters, el líder del grupo. El concepto general de la fotografía era que el cerdo apareciera flotando encima de la estación eléctrica de Battersea, como lo hemos visto toda la vida en la carátula del disco. ¿Por qué un cerdo? Porque este noble animal era la metáfora, difícilmente original, del opresor capitalista, que sobrevuela su propiedad fuera del alcance de la clase trabajadora. Como en aquellos años no existía el Photoshop, el cerdo tenía que volar de verdad, y para que no escapara lo amarraron a tierra con unas cuerdas. Pero resulta que al final de la sesión ese cerdo monumental soltó amarras y se fue cielo arriba, a sobrevolar plácidamente la ciudad de Londres. ¿No es privilegio del opresor salir volando cuando le dé la gana? Roger Waters había contratado un francotirador para que derribara al cerdo en caso de que escapara, pero el fusilero estaba distraído o se le atascó el arma, y el caso es que el cerdo siguió su plácido rumbo, practicando ese vuelo algodonoso que permite el helio. El cerdo se perdió de vista, pero reapareció 15 minutos más tarde, cuando un piloto que se aproximaba al aeropuerto de Heathrow lo vio volando a unos metros de su DC-9. No solo él lo vio, también los pasajeros, que juraron nunca más volver a pronunciar el absurdo refrán. El cerdo voló y voló hasta que perdió el helio y cayó irreconocible, arrugado como un edredón, en un campo sembrado de trigo.

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