El arte del sombrero

Mucho antes de que se perfeccionara el arte de la indumentaria, los hombres adornaban sus cabezas para dejar clara su condición social. El sombrero, aunque nació para protegerse del sol, evolucionó, en muchos casos, al margen de un objetivo práctico, como símbolo expresivo. Hoy la mayoría lleva la cabeza desnuda, pero este complemento retiene su capacidad transformadora.

La diseñadora Susana Loureda juega con la expresión a través de sus sombreros desde hace décadas. "Veo sombreros por todas partes", confiesa. Entre el 11 y el 30 de mayo presentará una selección de sus creaciones a través de la fotografía de Alberto García Alix, en la exposición La sombra engalanada, en el Espacio Expositivo de Madrid. El País Semanal recoge, este domingo, algunas de estas instantáneas.