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Seis ciudades optarán a ser capital cultural europea

Jesús Ruiz Mantilla

La crisis económica ha arrasado con el modelo de los grandes fastos. Quien no lo haya entendido, no juega a ser Capital Cultural Europea en 2016. Si hay algo que define como rasgo común a las seis localidades que ayer pasaron el primer corte es eso: cercanía y pequeños formatos. Burgos, Donostia, Córdoba, Las Palmas de Gran Canaria, Segovia y Zaragoza optarán a mediados de 2011 -después de las elecciones municipales, para que nadie saque rédito electoral- a ser la encargada del programa.

La cultura, proclamaban ayer los vencedores, debe ser cercana, pegada a la calle. Pero ese discurso reñía con la marabunta de medios de comunicación y el ambiente de mundial de fútbol que se vivía entre los concursantes.

Poca cultura y mucho ambiente deportivo, de semifinal de partido, es lo que reflejaban en las caras todos los asistentes ayer en el Reina Sofía de Madrid. A los diez minutos, Manfred Gaulhofer, el austriaco presidente del jurado -formado por 13 miembros: 6 españoles y 7 de la Unión Europea- dictaba sentencia.

Semana tensa

Había sido una semana tensa en la que las 15 candidaturas pudieron exponer sus programas durante una hora. No faltaron halagos para todos, ni desánimos. "Aprovechen el esfuerzo y el dinero gastado para enfocar más proyectos culturales", aconsejó Gaulhofer.

Las seis candidaturas cuentan con un rasgo común: la cercanía. César Falo, director de la Fundación Zaragoza 2016, contaba: "Hemos sido arriesgados y críticos con el modelo de capitalidad actual. Debe ser algo más cercano al creador anónimo, con proyectos de formato más humilde".

Carmen Calvo, ex ministra de Cultura, acompañó la candidatura de Córdoba y se mostró toda una hooligan de Al Andalus. Nuria Preciado, encargada de diseñar la acción de Segovia, recordaba: "Hemos puesto el acento en la mirada de una pequeña ciudad histórica del interior que necesita abrirse a la innovación social, al riesgo".

En el caso de Burgos influyó el verbo y los argumentos de José Luis Arsuaga, alma de Atapuerca. San Sebastián, con su cocina y sus festivales punteros, poco esfuerzo ha debido hacer para convencer al jurado. Su alcalde, Odón Elorza, comentó: "Hemos desarrollado nuestra propuesta sobre el eje de la cultura y la educación como superadores de los problemas de convivencia".

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Sobre la firma

Jesús Ruiz Mantilla
Entró en EL PAÍS en 1992. Ha pasado por la Edición Internacional, El Espectador, Cultura y El País Semanal. Publica periódicamente entrevistas, reportajes, perfiles y análisis en las dos últimas secciones y en otras como Babelia, Televisión, Gente y Madrid. En su carrera literaria ha publicado ocho novelas, aparte de ensayos, teatro y poesía.

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