"A menudo la música es el pariente pobre de la cultura"
Pierre Boulez (Montbrison, Francia, 1925), compositor, director y musicólogo, continúa infatigable y dispuesto a seguir aprendiendo a lo largo del siglo. Ayer recibió en Madrid la medalla de oro del Círculo de Bellas Artes. Posteriormente, el Plural Ensemble, bajo la dirección de Fabián Panisello, interpretó algunas de sus piezas de cámara. Como compositor, Boulez ha destacado por su libertad creativa y la gestación de un nuevo lenguaje musical. Sus grabaciones de Debussy, Bartók, Schoenberg o Stravinski son importantes en la ampliación del repertorio orquestal más allá de la tradición romántica. Se niega a utilizar batutas porque considera que son "como bastones para andar". "Y tengo las manos estupendamente".
Pregunta. ¿Se deja de ser transgresor con el paso del tiempo?
Respuesta. No, al revés. Cuanto más pasa el tiempo y más años tienes, más libre se siente uno. Si tienes vitalidad estás obligado a emplearla para descubrir nuevos territorios.
P. Revolucionó la música del siglo XX. ¿Con qué va a sorprendernos en el XXI?
R. No tengo suficiente tiempo para ello. Sabe que mi edad es bastante avanzada; por tanto, no me hago ilusiones. No tengo todo el siglo por delante. Me siento muy bien, pero soy consciente de mis limitaciones. Sé que no puedo acelerar mi actividad si quiero mantenerme activo el mayor tiempo posible.
P. ¿Qué no ha hecho que debería haber hecho?
R. Oh, muchas cosas, demasiadas, pero no lo lamento. Sé que mi vida ha estado muy llena. Ha ido en muchas direcciones, pero creo que he conseguido marcar un paso musical, y no se puede ganar en todo. Creo que he hecho cosas importantes y cosas menos importantes. Por tanto, considero que el balance final es bastante positivo. Si lo pienso, la verdad es que no me puedo quejar. Además, en muchas ocasiones he sido premiado. No nos vamos a engañar a estas alturas de la vida. Los premios te halagan y satisfacen ciertas dosis de vanidad que todos tenemos.
P. Peleó con las instituciones desde fuera -su enfrentamiento con el ministro de Cultura André Malraux le costó 10 años de exilio voluntario- y desde los despachos. ¿Qué es más rentable?
R. Cuando eres joven no tienes credibilidad porque no has hecho nada. Tienes personalidad y carácter, pero no has demostrado hasta dónde puedes llegar y qué puedes ofrecer. Por tanto, cuando uno es joven es como un perro que está fuera de casa. Puede ladrar, muy fuerte para que se sepa que está, pero una vez que estás dentro no sirve de nada ladrar. Al contrario, lo que hay que hacer es actuar. No he participado en muchas polémicas precisamente porque soy partidario de trabajar. Una vez que me han atacado yo no he respondido con frases, sino con acciones. El tiempo te demuestra que lo que vale es enseñar lo que uno puede y sabe hacer.
P. La música está obligada a cohabitar con las nuevas tecnologías. ¿El ordenador resulta hoy imprescindible para componer?
R. Es una herramienta de trabajo indiscutible, pero no es un objeto sagrado. Siempre da lo que tú le das, pero nada más.
P. ¿Le gusta el pop?
R. No estoy en contra. Lo único que digo es que es un nivel elemental y que a las nuevas generaciones el conocimiento sólo de esa música les lleva a un desarrollo escaso del ritmo. Se les debería dar la oportunidad de conocer más, porque hay composiciones que poseen un lenguaje apasionante, menos banal y repetitivo que el que escuchan.
P. Su conocimiento musical no le ha alejado de otras disciplinas artísticas.
R. A mí me resulta del todo imposible separar arte, literatura, teatro y música. Me interesa de la misma manera un cuadro que una obra de teatro y que una partitura, porque contemplando puedes encontrar la solución a lo que andas buscando. Sé perfectamente que no hay muchos pintores o poetas que se interesan por otras disciplinas que no sean la suya. A menudo, la música es el pariente pobre de la cultura."Me siento muy bien, pero soy consciente de mis limitaciones" "No estoy en contra del pop, pero lo considero un nivel muy elemental"
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.