_
_
_
_
_

Simón Peres pide un margen de confianza para el líder palestino

El viceprimer ministro israelí, el laborista Simón Peres, se desmarcó ayer de forma clara de las opiniones vertidas la víspera por varios compañeros del Gobierno de coalición, miembros todos ellos del conservador y nacionalista Likud, y exigió un margen de confianza para el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas.

Los titulares de Defensa, Saúl Mofaz, y de Exteriores, Silvan Shalom, aseguraron el viernes -dos días después del ataque terrorista que costó la vida a seis personas en Hadera, entre ellos el suicida de Yihad Islámica- que Abbas carece del respaldo popular de los palestinos, que ya no es un interlocutor con quien se pueda negociar un acuerdo de paz y que "no hace nada por desarmar" a los movimientos fundamentalistas. Pero incluso antes del atentado, el jefe del Ejecutivo, Ariel Sharon, había rechazado cualquier reunión con el mandatario palestino con el pretexto de que no rompe con Yihad Islámica y Hamás. Peres disiente abiertamente de esta decisión.

"Cuando dicen que no hay un compañero , sólo queda un socio posible, los terroristas. Éste es el primer error. Hay que luchar sin piedad y agresivamente contra el terrorismo, pero hay que buscar caminos para reanudar el proceso de paz", declaró el veterano laborista a una emisora de radio israelí.

El Ministerio del Interior de la ANP, por su parte, emitió ayer un comunicado en el que asegura que impedirá la fabricación de armas y explosivos "en talleres y almacenes" y que los milicianos de cualquier organización deambulen con sus fusiles automáticos por las calles palestinas. En las últimas semanas han saltado a menudo chispas cuando la policía ha tratado de desarmar a los activistas.

Mientras, el Ejército israelí mantiene sellados los territorios bajo ocupación de Gaza y Cisjordania y apostados a soldados y artillería en los límites de la franja. Ayer bombardeó carreteras del norte de Gaza tras el lanzamiento de cohetes Kasam a suelo israelí, y los cazas F-16, con sus vuelos a baja altura, desatan el terror en la población palestina, especialmente entre los niños.

Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_