EE UU admite que los talibanes derribaron uno de sus helicópteros
Un helicóptero militar estadounidense, con 17 soldados a bordo, fue derribado en Afganistán por los insurgentes talibanes, en uno de los mayores golpes para las tropas de EE UU desde que comenzaron su intervención en este país. El mando militar de EE UU admitió ayer que la caída del aparato se debió a "fuego hostil", después de que un portavoz de los talibanes asegurara a los medios que sus miembros habían derribado el helicóptero. El coronel James Yonts, portavoz de las fuerzas estadounidenses, confirmó que la aeronave había sido atacada "desde tierra", probablemente con un misil tierra-aire.
El Ejército de EE UU confirmó ayer que aún no ha localizado a ninguno de los 17 ocupantes del helicóptero derribado el martes. El CH-47 Chinook se estrelló al oeste de Asadabad, en la provincia de Kunar (este del país), cuando transportaba tropas para participar en una "operación antiterrorista" contra miembros de la red terrorista Al Qaeda, explicó el mando estadounidense en un comunicado. En la zona, cerca de la frontera paquistaní, se han estado librando intensos combates de fuerzas estadounidenses y afganas contra los insurgentes, dentro de la llamada Operación Ala Roja, y el helicóptero llevaba soldados para apoyar a sus tropas en tierra.
