Diez palestinos mueren tiroteados por soldados israelíes en Cisjordania
Una niña de 11 años figura entre las víctimas de los ataques
Diez palestinos, entre ellos una niña de 11 años, murieron ayer tiroteados por soldados israelíes en sendas operaciones llevadas a cabo en las ciudades cisjordanas de Nablús y Yenín, horas antes de que la comunidad judía celebrara la festividad del Año Nuevo hebreo, en el transcurso de la cual el Gobierno de Ariel Sharon ha decretado el cierre de los territorios de Cisjordania y Gaza. El Ejército israelí asegura que los nueve hombres que murieron en las operaciones, además de la niña, eran todos activistas radicales palestinos.
La operación militar de Nablús se inició en la madrugada, cuando decenas de vehículos blindados irrumpieron en el oeste de la ciudad, para rodear un edificio y establecer un asedio, que acabó convirtiéndose en un tiroteo indiscriminado contra los vecinos del inmueble. La operación duró hasta bien entrada la mañana y se saldó con cinco muertos, al parecer militantes de las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, según indicaron portavoces del Ejército.
Minutos después de que se diera por acabada la operación, mientras las ambulancias se disponían a evacuar los cadáveres de los activistas muertos, un soldado israelí, apostado en lo alto de una terraza, disparó a una niña de 11 años, Mariam al Nahel, que desde la acera contemplaba el traslado de las víctimas mortales. La bala la alcanzó en el rostro y provocó su muerte instantánea, según declararon sus familiares.
Centenares de vecinos de Nablús salieron a la calle en protesta y corearon consignas contra los soldados que habían disparado a la niña. La manifestación fue disuelta por los soldados que utilizarongases lacrimógenos. Los desórdenes finalizaron con más de una veintena de heridos, entre ellos un niño de 14 años.
Horas después de la operación de Nablús, un comando militar de las fuerzas especiales, disfrazado de palestinos, atacó un café del barrio industrial de Yenín, donde un grupo de hombres se encontraba desayunando. En el transcurso de la operación hubo un intercambio de disparos, a consecuencia de los que fallecieron otros cuatro supuestos activistas palestinos.
Portavoces de la Autoridad Nacional Palestina calificaron las dos operaciones de "actos criminales" y aseguraron que se trataba de las ofensivas más importantes efectuadas por el Ejército israelí en Cisjordania en los dos últimos años. En el transcurso de ambas intervenciones, los soldados cerraron el área e impusieron el toque de queda.
Coincidiendo con estos incidentes, y mientras desde los medios políticos palestinos e israelíes se decretaba formalmente el fracaso del último plan de paz, la Hoja de Ruta, presentado hace tres años por Estados Unidos, los presidentes egipcio, Hosni Mubarak, y sirio, Bachar el Asad, lanzaban un mensaje conjunto a Israel para que se siente a la mesa de negociaciones con los palestinos.
Mubarak y Asad se expresaron en Damasco al finalizar una cumbre que los dos líderes celebraron por la mañana. Mientras, en un lugar secreto cercano a El Cairo se ultimaban los detalles de una reunión que los dirigentes de las milicias palestinas celebrarán el lunes. El objetivo del encuentro es intentar decretar un alto el fuego en la Intifada, que empezaría a aplicarse coincidiendo con el cuarto aniversario del inicio de la revuelta, el 29 de septiembre de 2000.
