_
_
_
_
_

El premio Lengua de Trapo, desierto por segunda vez

El V Premio Casa de América de Narrativa, cuya obra ganadora publica la editorial Lengua de Trapo, fue declarado ayer desierto por unanimidad en Madrid por un jurado compuesto por Héctor Abad Faciolince, Eduardo Becerra, Adolfo García Ortega, Anne Marie Metailie y Ana María Moix; actuaron como secretarios con voz pero sin voto José Huerta y Anna María Rodríguez-Arias.

Ana López Alonso, directora del Ateneo de la Casa de América, explicó que el nivel medio de los 472 manuscritos presentados este año al galardón era "bastante bueno", pero que no hubo "ninguna novela de nivel como para premiarla, ninguna novela redonda que causara fascinación en el jurado".

"Ningún miembro del jurado tenía especiales ganas de defender a alguno de los tres finalistas", añadió López Alonso, que explicó que los originales se someten a "cuatro cribas de lectura muy concienzudas": "Hay muchos lectores que van puntuando y haciendo informes, y luego se cruzan los mejores y se deciden los finalistas, que el jurado recibió hace mes y medio".

Héctor Abad, escritor colombiano, que no asistió ayer a la deliberación por su negativa a pedir el visado que exige España a los ciudadanos de su país, envió un informe que coincidía con la opinión del resto del jurado.

Éste es el segundo año que el premio Casa de América se declara desierto, tras el de la tercera edición, pero sus responsables no se lo toman en absoluto como un fracaso. "No lo vivimos como un drama", dice López Alonso. "Es simplemente un año de mala cosecha. Y el año pasado, a cambio, publicamos dos libros en vez de uno porque nos gustó mucho el finalista". "El fracaso", añadió, "es publicar un libro malo y que la gente lo compre y ya no crea que el premio es riguroso y exigente".

El premio Lengua de Trapo saltó a la fama en enero de 2001, cuando un jurado presidido por Enrique Vila-Matas y formado además por Juan Villoro, Héctor Abad, Eduardo Becerra y Ana López Alonso desechó los cinco finalistas elegidos en la criba y rescató de la papelera una novela de 700 páginas que había llegado en una caja. El ganador fue Tulio Stella, de 56 años, argentino; su novela, La familia Fortuna.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_