_
_
_
_
_

Almodóvar lleva su talento a la Universidad

El cineasta clausura un congreso internacional sobre su obra en Cuenca

Jesús Ruiz Mantilla

De pronto, la frialdad y la pompa habitual de la universidad se transformaron en una feria de vida, en un cabaré lleno de chispa y en un foro de invención, talento mágico y provocación. Fue ayer en Cuenca, en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Castilla-La Mancha, donde Pedro Almodóvar clausuró un Congreso Internacional dedicado a su obra y en el que habló del pasado y del futuro, de la España viva de la democracia adolescente que él reconoció orgulloso haber retratado y de la actual: "No me siento con humor para poder burlarme de esta situación que vivimos con Aznar, es la peor desde que murió Franco", dijo el cineasta, rodeado de varios de sus actores, de 110 congresistas y de público variopinto, que disfrutó con ese chorro de creatividad que lleva a todos sitios, aunque ayer se confesara "abrumado" y con pinta de estar preguntándose: "¿Qué he hecho yo para merecer esto?".

"No me siento con humor para burlarme de esta situación que vivimos con Aznar"

Pues varias cosas, le podrían contestar los que durante cuatro días han estado analizando su obra, 15 películas ya, en Cuenca. Él se lo agradece: "Verdaderamente, me parece increíble que os guste perder el tiempo con mis películas y estoy encantado de que las podáis enriquecer con vuestros puntos de vista", les dijo. Porque Almodóvar se mostró generoso a la hora de dejar su obra a la libre interpretación: "Una película vista por mil personas se convierte en mil películas distintas y todas legítimas", aseguró, entre aplausos dignos de un Matador.

Se ganó a los presentes con frases y arrebatos de creatividad, contándoles anécdotas de su vida, su familia, piropeando a sus actrices, a todas las que le acompañaron ayer -Marisa Paredes y Cecilia Roth, flanqueándole, Geraldine Chaplin, Loles León, Mariola Fuentes, Candela Peña, Petra Martínez y Antonia San Juan, junto a un único hombre, Fran Boira, que debuta con él en La mala educación- o también contando ideas para próximas películas como una que se le ocurrió el otro día a partir de un cartel que vio por la calle en el que se leía: "Dona sangre". "Primero pensé: 'Qué bonito nombre de mujer'. Después se me ocurrió que podría ser una estupenda película de vampiros", aseguró, después de contar un argumento salpicado de científicos y frailes seropositivos que podría ser un auténtico Laberinto de pasiones.

También un retrato de la España actual, según cayó sobre la marcha, ésa en la que no se siente a gusto y que le tiene avergonzado: "Recuerdo que hace 30 años me daban ganas de reírme y de convertir en kitsch lo que me horrorizaba. El país nunca ha estado peor; me refiero desde que murió Franco, y lo impregna todo. La televisión ha llegado a niveles que nadie podría imaginar. Lamento haber perdido la capacidad de poder burlarme y solamente poder quejarme de todo. Me gustaría ser Valle-Inclán para crear un gran esperpento en qué mearme en lo que pasa. Me siento mal representado, avergonzado y no tengo distancia. Puede que no sea yo el que lo tenga que hacer, tampoco, pero me gustaría que alguien lo hiciera", aseguró, con lo que el cineasta dejó la clara impresión de sentirse actualmente bastante Entre tinieblas.

"¿Está mayor para provocar? ¿Y ese humor salvaje de sus primeras películas sigue destilándolo?", se preguntaban muchos. Él mismo también. Y lo dejó claro. "No creo que haya perdido comicidad, lo que pasa es que me he adentrado en otros géneros donde el humor no es esencial. Ahora, el humor en mis películas está en los personajes", aseguraba. También confesó que la chispa primera de su creación le viene del mismo lugar, "de la vida real", dijo, desvelando lo que puede ser La flor de su secreto.

Pero Almodóvar es muy permeable a los cambios, es una esponja que todo lo absorbe para un estilo vital, deslumbrante, el que le ha iluminado como el cineasta español más internacional de la historia, el que hace que le lluevan premios, honores, oscars, gloria. El que lleve una vida más monacal también influye en su arte: "No salgo, no me divierto ya por las noches, todas las noches se parecen unas a otras, debo encontrar un lugar en ellas. Me voy por ahí y bebo agua mineral, ya no me meto nada y lo de las pastillas, para mí ha llegado tarde; si tuviera 20 años, sería otra cosa, por supuesto, lo probaría todo", aseguró, con algo de nostalgia de aquellos tiempos locos de los ochenta cuando para que no anduviera por la calle tenía que ordenarle a alguien: Átame.

Por supuesto, exhibió ayer sus mejores modales de hombre del espectáculo para hablar de La mala educación. "Es una película que viaja en el tiempo, va a los años sesenta y vuelve a la actualidad. Es muy, muy fuerte", avisa a los bienpensantes. También analiza a los hombres más que a las mujeres y cuenta con Gael García Bernal, Fele Martínez, Fran Boira y Javier Cámara en el reparto, como si fueran reencarnaciones lejanas y masculinas y con más tormento de Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón.

El director de cine Pedro Almodóvar, ayer en Cuenca.
El director de cine Pedro Almodóvar, ayer en Cuenca.BERNARDO PÉREZ
Pedro Almodóvar, en el centro, rodeado de actores y amigos que le acompañaron ayer en Cuenca.
Pedro Almodóvar, en el centro, rodeado de actores y amigos que le acompañaron ayer en Cuenca.BERNARDO PÉREZ

Una calle y un centro digital para el cineasta

Caía un chirimiri triste y gris que tenía muy poco que ver con los colores explosivos de Pedro Almodóvar. Pero la de ayer fue una tarde muy alegre para el cineasta, que, aparte de clausurar el congreso internacional que le ha dedicado la Universidad de Castilla-La Mancha, inauguró el Centro de Documentación Digital Pedro Almodóvar. Llegaba al campus acompañado del rector Luis Arroyo Zapatero, de Patxi Andión, coordinador de este nuevo centro, y de muchos amigos que se mezclaban entre los alrededor de sesenta periodistas que acudieron a ver cómo retiraba la tela de la placa que conmemoraba el día. Iba bien abrigado pero un tanto encogido por el frío, con la carne trémula, que diría él, y con gesto abrumado. En el centro de documentación, creado a raíz de que esta misma universidad le nombrara doctor honoris causa en el año 2000, se podrá investigar todo lo que tiene que ver con el cine vivo y moderno de Almodóvar. La institución y la productora del director, El Deseo Films, han creado un espacio donde se podrán consultar 20.000 documentos de prensa aparecidos desde que se estrenó su película Átame hasta hoy. Y por supuesto, todo lo que tiene que ver con sus películas y los trabajos de preparación de éstas. El centro acogerá desde ahora a todos los investigadores del mundo que quieran realizar trabajos sobre el cineasta manchego y hoy mismo entrará en funcionamiento una página web para realizar todo tipo de consultas (www.uclm.es/almodovar)

Fue un acto emotivo y tumultuoso que se celebró antes de que Almodóvar y su troupe clausuraran ayer el congreso. Le acompañaba también su hermano Agustín, siempre tan discreto, que se mezcló con los reporteros gráficos para hacer fotos del artista junto a las autoridades académicas. Lo que tuvo que suspenderse fue la inauguración de una calle que llevará también el nombre del cineasta y que se encuentra dentro del campus de la universidad en donde todavía se están llevando a cabo muchas obras. Los estudiantes de la Facultad de Bellas Artes recibieron al director con vítores y muestras de cariño. A él no le costó sentirse como en casa entre los pasillos de la facultad, decorados con esculturas y cuadros vistosísimos y plagados de colores fuertes de sus alumnos.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Jesús Ruiz Mantilla
Entró en EL PAÍS en 1992. Ha pasado por la Edición Internacional, El Espectador, Cultura y El País Semanal. Publica periódicamente entrevistas, reportajes, perfiles y análisis en las dos últimas secciones y en otras como Babelia, Televisión, Gente y Madrid. En su carrera literaria ha publicado ocho novelas, aparte de ensayos, teatro y poesía.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_