La rebelión policial contra Arafat se extiende por los territorios palestinos
La rebelión de la policía palestina en protesta por las purgas políticas efectuadas por el presidente Yasir Arafat y el nuevo ministro del Interior, Abdel Razik Yehiyeh, en la cúpula de las fuerzas de seguridad ha empezado a extenderse por los territorios autónomos. Unos 600 funcionarios de la seguridad salieron ayer a las calles de Ramala para protestar por la destitución de su jefe, el coronel Yibril Rayub, responsable de la Seguridad Preventiva en Cisjordania. Poco después, los destacamentos de Hebrón y Jericó se unieron a la protesta y anunciaban que ellos tampoco respetarán las órdenes del nuevo jefe de esta fuerza, el ex gobernador de Yenín Zuhair Manasra.
Los hombres del coronel Rayub se concentraron ayer en la plaza de Manara, en el centro de Ramala, después de haber celebrado una asamblea en el cuartel general de las tropas en Betunia, donde se comprometieron a continuar las campañas de movilizaciones para apoyar a su jefe destituido. Los rebeldes anunciaron que no cesarán en su protesta hasta que el presidente Yasir Arafat lo restituya de nuevo en su puesto.
La protesta de los miembros de la Seguridad Preventiva de Cisjordania, constituida por 4.000 hombres, va dirigida contra Arafat y su política de reformas, pero en especial contra el nuevo ministro del Interior, que fue nombrado hace cerca de un mes dentro del programa de democratización exigido por EE UU. Hasta entonces, las funciones de ministro del Interior, responsable directo de las fuerzas policiales palestinas, la venía ejerciendo el propio Arafat.
A la misma hora en que la policía palestina se manifestaba pacíficamente ayer por Ramala, varios centenares de militantes del Frente Popular de Palestina y de los sectores radicales de Al Fatah se concentraban ante las oficinas de Naciones Unidas en Gaza para pedir la liberación de los líderes políticos encarcelados.
Por otra parte, Nur, una niña de dos años, y su madre, Rania, de 44, murieron ayer como consecuencia de los disparos efectuados por el Ejército israelí contra el taxi en que viajaban, según aseguraba un portavoz de la Autoridad Palestina.
El incidente, registrado en el centro de la franja de Gaza, se produce dos semanas después de que otros tres niños palestinos murieran por losdisparos de un tanque israelí contra el mercado de Yenín.
