_
_
_
_
_

Descubren en el mar Negro los restos de una ciudad del año 5000 antes de Cristo

El hallazgo de 'National Geographic' puede dar base científica al relato del Arca de Noé

"Es un descubrimiento increíble". Así se manifestó ayer el científico Robert Ballard, desde un barco que surca el mar Negro, al informar del descubrimiento de una antigua ciudad sumergida que ofrece testimonio de vida en esa zona 5.000 años antes de Cristo. Al frente de una expedición patrocinada por la revista National Geographic, el hallazgo del equipo que dirige Ballard podría dar base científica al relato bíblico del Arca de Noé. El descubrimiento ha sido realizado en las costas turcas del mar Negro a través de la utilización de un robot submarino.

Bien preservados

Una expedición submarina de National Geographic ha descubierto los restos de una antigua población en las profundidades del mar Negro que presumiblemente desapareció en unas inundaciones similares al diluvio descrito en la Biblia. El director del proyecto, Robert Ballard, el científico que descubrió los restos del Titanic, encontró hace unos días los vestigios de una casa en aguas territoriales turcas. Se trata del primer testimonio de vida en estas costas unos 5.000 años antes de Cristo. Los investigadores aseguran que los hallazgos pueden reescribir la historia de la región e incluso dar una base científica al relato de Noé.National Geographic anunció ayer los primeros resultados de esta expedición de cinco semanas, que todavía navega cerca del litoral turco. Los restos se encontraron cerca de la ciudad de Sinop y a unos 95 metros de profundidad. El descubrimiento atestigua de este modo la existencia de una actividad humana en las costas del mar Negro en la era glaciar, antes de que el litoral quedara sumergido hace miles de años. Los restos, que fueron descubiertos por un robot submarino llamado El Pequeño Hércules, se hallan en perfecto estado de conservación debido a la falta de oxígeno en el agua de la citada zona.

"Éste es un descubrimiento increíble", dijo Ballard en una entrevista telefónica realizada desde el barco de la expedición, el Northern Horizon, y hecha pública ayer desde Washington por National Geographic. "Los restos en este lugar están muy bien preservados, con vigas de madera trabajadas, ramas de árbol e instrumentos de piedra amalgamados en una especie de estructura de barro, algo que presumiblemente era una casa"."Hemos descubierto esta estructura muy temprano en la expedición y estamos ampliando nuestras búsquedas a un área más grande. Ahora vamos a las orillas del valle donde creemos que vivía más gente y esperamos llevar a cabo nuevos descubrimientos. Esperamos encontrar más instrumentos que podamos fecharlos con carbono y determinar qué tipo de gente vivía en aquella época", contó Ballard.

El jefe de los arqueólogos del proyecto, Frederik Hiebert, de la Universidad de Pensilvania, tampoco podía disimular su entusiamo por los increíbles resultados de las primeras semanas de exploración. "Este hallazgo es la primera evidencia concreta que tenemos de la ocupación de la costa del mar Negro antes de las inundaciones. Es un descubrimiento que va a reescribir la historia de las culturas en esta región clave entre Europa, Asia y el antiguo Oriente Próximo".

La expedición espera demostrar con estos hallazgos que el diluvio descrito en la Biblia corresponde a unos fenómenos naturales que provocaron un auténtico cataclismo en la zona del mar Negro. Esta teoría se basa en la investigación de los geológos norteamericanos William Ray y Walter Pitman, de la Universidad de Columbia. En su libro El diluvio de Noé, un texto publicado en 1997, aseguran que el mar Negro era un lago de agua dulce hasta que fue inundado por el Mediterráneo hace aproximadamente unos 7.000 años.

Debido al recalentamiento de los glaciares, el nivel del agua llegó a subir hasta casi 2.000 metros, en un flujo superior incluso al de las cataratas del Niágara. La inundación amplió las orillas del mar Negro hasta el nivel actual y sumergió de este modo todas las poblaciones que vivían en la zona.

La expedición de National Geographic ya ha identificado un segundo hallazgo, a una decena de kilómetros de los primeros vestigios, donde ya se habrían encontrado primitivas piezas de cerámica. "Ahora podemos confirmar gente que vivía a orillas del mar Negro cuando todavía era un lago de agua dulce", manifestó Hiebert.

Ballard, que ha puesto en pie la expedición, se dio a conocer en 1985, cuando descubrió los restos del Titanic, y desde entonces ha resuelto muchos misterios submarinos, sobre todo de naufragios de guerra. La investigación sobre el mar Negro comenzó el año pasado, al tratar de comprobar las teorías de Ray y Pitman. Las pruebas al carbono de la vida marina, especialmente de conchas de agua dulce, confirmaron la profunda transformación del lago unos 7.500 años antes de Cristo. Fue entonces cuando surgió la idea de ir más allá y buscar poblaciones perdidas.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_