_
_
_
_
_
Crítica:FLAMENCO - ENRIQUE MORENTE
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Persiguiendo la esquiva fusión

Innovador

Voces de Al-Andalus

Enrique Morente (cante) y Orquesta Chekkara de Tetuán. Guitarras: Pepe Montoyita y Manuel Parrilla. Violín: Bernando Parrilla. Centro Cultural Conde Duque. Madrid, 3 de septiembre.

Morente ha hecho este nuevo intento de fusión flamenca con música norteafricana, y me temo que no haya conseguido mucho más que lo alcanzado por otros en anteriores ocasiones. El cantaor y la Orquesta Chekkara de Tetuán son viejos conocidos, estuvieron juntos hace ya casi dos décadas en aquel empeño teatral que se tituló Macama jonda.¿Pero qué es la fusión en música? Hasta ahora me parece que no ha sido mucho lo conseguido. Entiendo que no debe confundirse fusión con mestizaje, que es lo que está ocurriendo casi siempre. Por supuesto que vivimos una época de acentuado mestizaje en todas las parcelas del arte, pero la fusión es otra cosa. No diré que opuesta, pero bastante distinta.

En este caso el concierto de anoche confirmó mi vieja impresión de que el flamenco y la música marroquí tienen poco que ver, pese a los siglos de convivencia histórica en nuestro suelo. La parte que los músicos de Tetuán hicieron solos nos ofrecieron varios temas que se nos antojaron monocordes, algunos verdaderas melopeas que en nada nos aproximaban al sonido flamenco.

Después hicieron con Morente tres o cuatro temas, que a fin de cuentas eran flamenco con el acompañamiento de los de Tetuán, más los músicos flamencos de Morente. Incluso algunos de esos temas ya los tiene grabados él mismo con los más convencionales acompañamientos de guitarra.

Es decir, que no se trata de un nuevo lenguaje musical que participe del flamenco y de la música marroquí, que es lo que creo debe ser la fusión, sino de la música flamenca de Morente a la que se ha añadido la orquesta del sur del Estrecho. La rondeña final, por ejemplo, que cantaron alternativamente Morente y Jallal Chekkara, conserva perfectamente la estructura del estilo flamenco, aun en las coplas que el marroquí canta en su idioma.

O sea, que no se trata de un nuevo lenguaje musical, sino de la música flamenca de Morente, a la que éste ha incorporado el acompañamiento genuino de una orquesta norteafricana. Si esos mismos temas hubieran tenido otro acompañamiento, la diferencia no hubiera sido sustantiva. Estamos diciendo, pues, que quizás Morente no ha acertado, o no ha culminado, un intento de fusión en el sentido que damos a este término, lo que no quiere decir que el concierto de anoche resultara fallido. Bien al contrario, el público ovacionó largamente a los artistas al término del concierto, y es verdad que los cantes que hizo Morente con los músicos de Tetuán alcanzaron una belleza poco usual.

Y, además, Enrique Morente hizo una primera parte, arropado solamente por los músicos flamencos, de arte jondo tradicional. Todo lo tradicional que puede ser el cante de este conspícuo innovador que en todo lo que hace introduce melismas propios, tonalidades personalísimas y recursos cantaores casi de su exclusiva propiedad. Esa primera parte dio testimonio una vez más de que Enrique Morente, conociendo el patrimonio clásico del flamenco en profundidad, no se conforma con repetirlo durante años una y otra vez en los mismos términos, sino que para él es un objetivo prioritario introducir siempre su propio toque creativo.Ésta es la nueva propuesta de Enrique Morente que, como siempre, ofrece una grata dimensión de novedad que en un artista como él ya no puede sorprender. Y que se le agradece en este tiempo bastante gris en el cante.

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_