Los fósiles de dinosaurios hallados en Bolivia aclararán su comportamiento social

El hallazgo de vastos yacimientos de fósiles del periodo cretácico superior en los valles centrales de Bolivia permitirá elaborar nuevas teorías sobre la migración y el comportamiento social de los dinosaurios hace unos 70 millones de años. Las huellas son un testimonio "único a escala mundial" del periodo cretácico, declaró el representante del Museo Natural de Solothurn de Suiza, Christian Meyer. Estos hallazgos permiten concluir, por ejemplo, que los dinosaurios eran gregarios y que protegían a los más pequeños y jóvenes colocándolos en el centro del grupo.

En el informe elaborado tras inspeccionar Cal Orcko, una cantera de cal a cinco kilómetros de Sucre, Christian Meyer señala que, además de Cal Orcko, se han encontrado miles de huellas en Quila-Quila, Umaca y Maragua, situadas a unos 70 kilómetros al norte de Sucre. En Toro-Toro, norte de Potosí y cercano a estos lugares, se acaba de encontrar el esqueleto fosilizado de una dinosaurio, aun cuando no se han dado mayores detalles. En Cal Orcko se han identificado huellas de 15 variedades diferentes, informó el paleontólogo boliviano Mario Suárez. Entre éstas se observan claramente impresas dos pistas gemelas de huellas de saurópodos (probablemente titanosaurios) de unos 66 centímetros de largo por 64 de centímetros de ancho. Éstas y otras huellas de terópodos, ornitópodos cuadrúpedos, hadrosaurios, iguanodóntidos y ornistisquios herbívoros se encuentran en un farallón de 70 metros de alto por un kilómetro de ancho.

En Quila-Quila, a lo largo de más de 20 kilómetros se han hallado miles de huellas de saurópodos, terópodos, anquilosaurios, ornitópodos y estegosaurios. El presidente de la Sociedad Científica Universitaria de Paleontología de Sucre, el guaraní David Kereimba, explicó que junto a Vicente Rial y otros miembros de la sociedad han podido establecer también la existencia de dos tipos de huellas que no están clasificadas.

Puede tratarse de saurópodos cuadrúpedos "con impresiones plantares romboideas que se asemejan a las de los tigres o perros", pero de gran tamaño, informó Kereimba. Las huellas traseras miden unos 60 centímetros y las delanteras unos 40, y la distancia entre paso y paso es de un metro y medio de largo por medio metro de ancho, lo cual permite pensar en un animal de más de ocho metros de alto.

Estos hallazgos permiten concluir por ejemplo que los dinosaurios eran gregarios y que protegían a los más pequeños y jóvenes colocándolos en el centro del grupo que era rodeado por los adultos, de acuerdo a la colocación de las huellas mayores, medianas y pequeñas.

En Toro-Toro, a unos 500 kilómetros al sur de La Paz, se encontró fortuitamente un esqueleto fosilizado de un dinosaurio y aparentemente de una tortuga gigante. En Tarija, en el extremo sur, y Pando, en el extremo norte de Bolivia, se hallaron huesos enormes, algunos de ellos fueron sacados del país para un estudio especializado, ya que en esta nación andina hay contados profesionales y el Estado nunca ha dado mayor apoyo ni a ésta ni a otras ramas de la investigación científica.