Ningún medio cubano se hizo eco de la noticia

La entrega del Premio Cervantes de Literatura al escritor Guillermo Cabrera Infante pasó inadvertida en Cuba, su tierra natal, donde ningún medio se hizo eco del acontecimiento. Cabrera Infante, de 69 años, es el tercer literato cubano que recibe ese premio desde que fue instituido en 1976, pero el primero de ellos que es galardonado mientras se encuentra en el exilio y el único que aún vive. Antes de Cabrera fueron galardonados con el Cervantes, el novelista Alejo Carpentier (1977) y la poetisa Dulce María Loynaz (1992).

Partidario de la Revolución castrista en los primeros momentos, el autor de Tres tristes tigres rompió con el régimen en 1968 y desde entonces vive exiliado en Londres. Su postura crítica hacia el gobierno del presidente Fidel Castro ha hecho que Cabrera Infante, que ahora tiene pasaporte británico, haya sido "borrado" de la cultura oficial cubana. Su nombre no aparece en el Diccionario de la Literatura Cubana publicado en 1980 por el Instituto de Literatura y Linguística de la Academia de Ciencias de Cuba.

Sin embargo, algunos de sus libros se pueden encontrar en el tradicional mercado de libros antiguos que cada día se abre en la céntrica Plaza de Armas de La Habana. El libro de cuentos Así en la paz como en la guerra y Un oficio del siglo XX, una recopilación de sus críticas cinematográficas, ambas en ediciones cubanas de los años 60, se podían ver ayer expuestos en los improvisados estantes.

Ambas obras se venden a un precio que oscila entre los 13 y los 20 dólares. El dólar se cotiza actualmente a 19 pesos y un salario medio en Cuba es de unos 300 pesos mensuales.

Un librero que pidió el anonimato reconoció que algunas obras de Cabrera Infante, tanto en ediciones cubanas como españolas, se pueden vender "sin problema", aunque otras -y citó expresamente La Habana para un infante difunto y Mea Cuba- "no sería conveniente colocarlas en el estante"