Transformaciones
El programa de la Orquesta Nacional, dirigida esta semana por Antoni Ros Marbá fue tan bello y atractivo como sorprendente: Pergolesi, frente a su transformación en manos de Stravinski.Que en los temas pergolecinos trabajados por Stravinski haya algunos de otros autores -como detalla Luis Carlos Gago- carece de importancia, pues lo que la tiene es la creación del autor de Petruscka, y la inauguración de uno de sus periodos estilísticos y conceptuales.
Necesita La Serva Padrona una pareja de altísima calidad, lo que no llegamos a tener en Nucia Focille, soprano de voz brillante aunque no demasiado atractiva y agilidad no siempre segura, y en el barítono William Shimell, de timbre densamente coloreado y elegante línea. Se sumó al reparto el tenor Francesc Garrigosa, que no sobrepasó ni desmereció a sus compañeros.
Orquesta Nacional de España
N. Focille (soprano), W. Shimell (barítono) y F. Garrigosa (tenor). Obras de Strawinsky y Pergolesi. Auditorio Nacional. Madrid, 5 de noviembre.
El divo de la tarde fue Ros Marbá, tanto por el dominio de los estilos como por la creación de belleza sonora. Los profesores de la ONE demostraron que una cosa son los problemas laborales y otra hacer música. Y la hizo de la mejor manera que sabe y puede. Como siempre con Ros Marbá hubo música y nada más, ni nada menos.
