'Gitanito' es la sensación
El indulto del toro Gitanito en la corrida del pasado martes ha causado sensación. Ayer todo el mundo hablaba en Valencia del toro. De repente, toda Valencia, tanto la taurina como la no taurina, se había hecho torista. La novedad del indulto -primero que se concede en la historia de esta plaza- era motivo de comentario en la calle, pero también el propio comportamiento del toro en el ruedo, que emocionó a quienes lo vieron y provocó un entusiasmo sin precedentes.
La casta del toro -aquella embestida creciente, alegre y entregada- fue lo que comnocionó a los aficionados. Álvaro Domecq, propietario de la ganadería Torrestrella, a la que pertenecía Gitanito, dijo a Efe que su preocupación es salvar la vida del toro, pues sangró mucho. "Si lo consigo", añadió, "lo destinaré a semental, para que padree en la ganadería".
Concedido el indulto, Domecq recibía las felicitaciones del gentío que suele permanecer en el callejón y no se sabe qué pinta allí, mientras el toro y el torero que lo lidió magistralmente, Dámaso González, eran aclamados por el público.
