Al hilo del dibujo

La trayectoria de Teresa Lanceta (Barcelona, 1951) ha estado esencialmente ligada a la memoria del universo textil, sus raíces, usos, técnicas y lenguajes. En ese sentido, su aportación supone, de lejos, la reflexión más interesante, arriesgada y compleja que sobre el tema se ha dado en nuestro contexto reciente, en una apuesta que rompía con una larga tradición de equívocos en torno a la reivindicación trascendente de lo artesanal.Sin romper con la esencia fundamental que, en el sentido hasta aquí descrito, había guiado su meditación, Teresa Lanceta nos presenta en esta nueva muestra un ciclo de trabajos que establece un quiebro significativo con relación a su obra anterior. Hay por un lado -en lo que venía siendo un impulso largamente acunado por la artista en estos últimos tiempos- un mayor acercamiento a la convención objetual del cuadro y, en un sentido más extenso, a la esfera de lo pictórico. A su vez, emplea aquí temas y motivos iconográficos que nos remiten a una visión perversa y mordaz del territorio mítico de la infancia, en sus protagonistas o en sus arquetipos narrativos. Pero, más allá de esos dos rasgos distintivos, el flujo natural de la reflexión de Lanceta queda garantizado ahora por un desplazamiento hacia la tradición de las técnicas del bordado como un modo particular del dibujo y al uso de tejidos diversos como soporte material y campo de representación.

Indudablemente sugerente, tanto en su planteamiento como en los elementos puestos en juego, reconocemos en este ciclo, la voluntad de riesgo que ha caracterizado el devenir de la obra de Teresa Lanceta. Sin embargo, su materialización no obtiene en todos los casos resultados de igual fortuna. Ciclo de transición, en la medida que cambia drásticamente las reglas de juego, no siempre alcanza en los formatos mayores una intensidad satisfactoria. Lo mejor es el conjunto de piezas de la sala final en el recorrido de la exposición.