El Supremo condena a Jimmy Giménez Arnau por un libro sobre los Urquijo
El Tribunal Supremo ha desestimado el recurso interpuesto contra la sentencia que condenó a Jimmy Giménez-Arnau, Mauricio López Roberts, Rafael Borrás y Editorial Planeta a indemnizar a Juan de la Sierra, hijo y heredero de los marqueses de Urquijo -asesinados el 1 de agosto de 1980-, con seis millones de pesetas, por el libro Las malas compañías, del que son autores los dos primeros y que atenta contra la intimidad, el honor y la imagen de los marqueses.Por igual motivo, se condena a Giménez-Arnau, a la revista Cambio 16 y a su director, Juan Tomás de Salas, a indemnizar con 500.000 pesetas por el suelto titulado El prepucio del marqués. La revista deberá publicar el fallo de la sentencia con iguales características que el suelto citado.
El origen de este caso fue la publicación, en mayo de 1985, del libro sobre el asesinato de los marqueses de Urquijo, titulado Las malas compañías, cuyos autores son Jimmy Giménez-Arnau y Mauricio López Roberts y Melgar, marqués de Torrehermosa -este último, condenado en su día a 10 años de cárcel, como encubridor del doble asesinato de los marqueses-, y editado por Editorial Planeta, dentro de una colección dirigida por Rafael Borrás. La revista Cambio 16, en su primer número de junio del mismo año, se hizo eco de la presentación de la obra mediante un suelto sin firma titulado El prepucio del marqués.
Texto vejatorio e hirienteLa sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado Teófilo Ortega Torres, desestima el recurso de casación, entre otros razonamientos, por entender que ni el libro ni el suelto periodístico están amparados por el derecho constitucional a expresar y difundir libremente pensamientos, ideas y opiniones y a comunicar y recibir libremente información veraz. Por el contrario, entiende que se revelan "hechos que suponen una grave intromisión en la intimidad del marqués de Urquijo ( ... ) y que afectan exclusivamente a su vida privada".
La sentencia reproduce la siguiente parte del suelto publicado en Cambio 16: "Entre otras jugosidades, contó algo que está en el sumario, pero que no ha sido aireado convenientemente: que el administrador de los Urquijo, Diego Martínez Herrera -llamado a declarar de nuevo recientemente-, tenía la obligación de lavarle todos los días el prepucio al señor marqués, que sufría en tan delicado sitio de un herpes pertinaz y molesto. Detalle que los jueces deberán tener en cuenta a la hora de buscar móviles para el brutal asesinato".
