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Una biblioteca para la gente

La Fundación Bertelsmann y el Ayuntamiento balear de Alcudia abren un nuevo templo para el Ebro

Alcudia, una población mallorquina de 8.000 habitantes en la temporada no turística, tendrá desde hoy abierta al público una biblioteca capaz para albergar 12.000 volúmenes y dotada con todos los adelantos técnicos, que la convertirán en un ejemplo para la política bibliotecaria española. La iniciativa es de la Fundación Bertelsmann y del Ayuntamiento de la localidad (véase EL PAÍS de ayer) y constituye una novedad dentro del sistema de las bibliotecas de nuestro país. La inauguración popular de la biblioteca se ha querido hacer coincidir con del Día del Libro.

La Biblioteca de Alcudia se abrió oficialmente el sábado con la presencia del presidente de la Fundación Bertelsmann, Reinhard Mohn, residente desde hace años en la citada localidad balear.La biblioteca es el producto de dos años de trabajo conjunto entre la Fundación Bertelsmann y el Ayuntamiento de Alcudia, uno de los principales centros del turismo internacional que se concentra en Mallorca. La idea procede de Reinhard Mohn, presidente de Bertelsmann y constructor de una de las principales multinacionales de la edición y de la comunicación que hay en el mundo, y, que en España posee, entre otros medios, el Círculo de Lectores y la editorial Plaza y Janés. La iniciativa contó desde el principio con el apoyo del Ayuntamiento de la localidad. Juntos forman el Patronato de la Biblioteca, que preside Magdalena Víver, en representación del Ayuntamiento. El vicepresidente es el propio Mohn.

En el acto inaugural del sábado, Mohn definió los objetivos: "La Biblioteca de Alcudia se ha fijado una meta alta: debería ayudar a mantener y desarrollar la base de nuestra cultura, la técnica de leer y el trato con la literatura. En nuestros tiempos los medios impresos tienen mucha competencia con otros medios informativos, especialmente los medios electrónicos como la televisión, que ocupan cada vez más el tiempo y la atención del público. Deberíamos procurar que el uso de estos medios diferentes no sean sustituibles y equivalentes".

Día del Libro

La Fundación Bertelsmann, preocupada desde hace años por la difusión del hábito de la lectura, considera que iniciativas de esta clase, dirigidas a estimular el uso del libro en todos los ámbitos, pueden corregir la tendencia a abandonar la lectura en favor de otros medios. Como símbolo de este propósito, la inauguración pública de la biblioteca se produce el Día del Libro, aunque a mediados del próximo mes de mayo tendrá efecto un acto de inauguración con la participación de diversas autoridades españolas.El Ayuntamiento de Alcudia adquirió el edificio por 40 millones de pesetas. BerteIsmann se ha hecho cargo de la restauración, de los fondos iniciales, del mobiliario y de los gastos del montaje por un total de 135 millones de pesetas, así como de la selección del personal.

La reconstrucción del edificio donde se alberga la Biblioteca de Alcudia ha sido realizada por el arquitecto Xavier Massanet, que ha tratado de respetar en todo lo posible la estructura de un inmueble del siglo XV ahora transformado para uso público.

Antes del acto inaugural del sábado, Mohn, rodeado de futuros usuarios de la biblioteca y de los funcionarios que la van a poner en funcionamiento, consideraba que dentro del conjunto de iniciativas que le han convertido en uno de los hombres más poderosos del mundo de la comunicación, ésta le producía una alegría a la que era difícil hallar parangón en su experiencia. "Es como si después de una mañana nublada hubiera salido el sol". La directora de la biblioteca, Eulàlia Espinás, barcelonesa de 29 años, considera que el acuerdo entre el Ayuntamiento de Alcudia y Bertelsmann ha propiciado una orientación que desvincula a la iniciativa de los riesgos de la burocracia. "Esto nos ha proporcionado una gran agilidad en el proceso de constitución de la biblioteca".

Servicio público

La propia concepción de la biblioteca, en la que ha colaborado estrechamente Ute KIaasen, directora de la Biblioteca de Gütersloh, la localidad de la República Federal de Alemania donde tiene su sede la Fundación Bertelsmann, le permite albergar a Eulàlia Espinás esperanzas sobre el futuro de la iniciativa: "Es una biblioteca al servicio de la sociedad, teniendo en cuenta ese servicio como absolutamente primario. Y en ese sentido la experiencia que se pone en marcha puede considerarse prácticamente inédita porque queremos estar atentos a las demandas de la sociedad para ir constituyendo el fóndo". La biblioteca puede albergar hasta 12.000 volúmenes. La doctora KIaasen, cuya idea ha inspirado en buena parte esta iniciativa, resume su concepto: "Hay que hacer bibliotecas ideales y humanizadas, teniendo en cuenta al usuario y añadiendo nuestros propios sueños a lo que demandan los otros de modo que no tengamos en ellas sólo los libros que nosotros queremos sino los que quiere todo el mundo. En una biblioteca, antes que el libro es la persona lo que cuenta".

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