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PRESIÓN SOBRE TEL AVIV

El desafío de la no violencia

Llamamiento de los dirigentes palestinos para no pagar impuestos en los territorios ocupados

Un grupo de dirigentes palestinos de Jerusalén ha decidido efectuar un llamamiento a la "resistencia no violenta", que está previsto se oficialice hoy, coincidiendo con un momento en que la represión israelí en los territorios ocupados se ha endurecido. Nueve palestinos están a punto de ser expulsados de sus hogares; cada día, decenas de jóvenes palestinos entre 15 y 20 años comparecen ante los tribunales militares y son procesados aceleradamente, y las mujeres palestinas toman el relevo y salen a la calle, desafiando las balas de los soldados.

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Hanna Siniora, director del diario pro-OLP (Organización para la Liberación de Palesti na) El Fajr; Seri Nusseibeh, profesor de Filosofía en Bir Zeith, y Mubarak Awad, fundador del Centro de Estudios para la No Violencia, han decidido hacer un llamamiento a la población palestina para que boicotee los productos israelíes, no pague el impuesto sobre el valor añadido establecido por el Tesoro israelí y otras medidas parecidas.Interrogado por el motivo de este llamamiento, Siniora con testa: "Para hacer comprender a los dirigentes y al pueblo de Israel que no puede continuar la ocupación, que se ha hecho intolerable. Al mismo tiempo, querríamos con esta acción no violenta no alienar al público israelí". El llamamiento será aplazado, dicen sus promotores, si el Gobierno israelí re nuncia a las deportaciones de palestinos y pone fin a las otras medidas de represión draconia na y, sobre todo, "si elige la vía de la razón y de las conversa ciones políticas".

Es irónico y significativo que los líderes palestinos que apo yan a la OLP deban ahora pre dicar a Israel las virtudes de la negociación. El primer ministro israelí, Isaac Shamir, no está convencido de ello. Shamir acaba de declarar a una delega ción de parlamentarios judíos que la conferencia internacio nal sobre la paz en Oriente Pró ximo, que permitiría finalmente la apertura de conversaciones directas árabe-israelíes, sería "suicida" para Israel.

Las razones que han empujado a Siniora y a sus amigos a preconizar la resistencia no violenta a la ocupación israelí son, sin embargo, más complejas de lo que parece a primera vista.

La OLP y sus representantes oficiosos en Cisjordania y Gaza se han dado cuenta bruscamente de que el rumbo de los acontecimientos se les escapa. El movimiento de protesta desencadenado el pasado mes por la juventud palestina, nacido y conducido desde el interior, les ha cogido desprevenidos.

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En los años sesenta, Yasir Arafat y sus compañeros se revolvieron contra la vieja generación de dirigentes palestinos, representados por Ahmed Chukei, y crearon entonces una nueva organización palestina nacional que pretendía ser independiente de las demás naciones árabes.

La nueva generación

Hoy, la nueva generación de palestinos de Cisjordania y Gaza, descontentos y desencantados, lanzan un desafio a la OLP de Arafat, cuya actividad política y militar no ha logrado liberarlos de la ocupación israelí, que entra en su 21º año.

El profesor Moshe Maoz, especialista en el tema palestino, está de acuerdo con esta visión. "Los jóvenes ya no escuchan a los hombres ponderados como Siniora. Se sienten engañados, traicionados en sus esperanzas. No sólo la OLP está inquieta. Tambien Jordanla está preocupada por la radicalización de la juventud palestina", explica.

Arafat, que teme ser desbordado por este movimiento popular y quiere tener las riendas en la mano, ha decidido explotar las revueltas en los territorios ocupados para lanzar una ofensiva diplomática y poner a Israel ante el reto de tener que negociar la paz. De ahí sus declaraciones a The Washington Post, al manifestar -"en nombre de mi pueblo"- que está dispuesto a negociar la paz con Israel sobre la base de las fronteras existentes en 1967. Es la primera vez que el líder de la OLP llegó tan lejos.

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