EL fiscal pide la pena de muerte para siete integristas islámicos argelinos
El fiscal del Tribunal de Seguridad del Estado de Medea, Alí Sahraoui, ha pedido la pena de muerte para siete miembros de un grupo de 202 activistas integristas que están siendo procesados en esta ciudad, a 100 kilómetros al sur de Argel. El fiscal ha solicitado penas de prisión perpetua para otros tres procesados y 25 años de cárcel para otros dos.Djaafar Berkani, uno de los activistas cuya condena a muerte fue pedida por el fiscal Sahraoui y que había sido juzgado en rebeldía, ya no podrá apelar, puesto que fue abatido por las fuerzas de seguridad el pasado lunes en Argel, casi en el mismo momento en que la acusación formulaba sus peticiones ante el tribunal.
Los otros acusados cuya pena de muerte fue solicitada por el fiscal son los hermanos Meliani y Rachid Mansuri, Abdelkader Chebuti, Tayeb Amanira, Amar Djenadi y Bulanuar Tayebi. Los dos principales acusados en el proceso, Meliani Mansuri y Abdelkader Chebuti, son considerados como los dos lugartenientes de Mustafá Bouyali, jefe del grupo activista, que también fue muerto en enero pasado por los servicios de seguridad. El grupo fue responsable del asalto a la escuela de policía de Argel en agosto del año pasado, acción en la que murió un guardia.
Berkani, uno de los miembros fundadores del grupo de Bouyali y el único dirigente que permanecía en libertad, había sido detectado en la tarde del pasado jueves en el barrio popular de Bab el Ued, en Argel, pero logró escapar del cerco tras herir a un comisario de policía, según la versión oficial. Las fuerzas de seguridad volvieron a localizarlo el lunes en la barriada de Bachjará, en las afueras de Argel, y lo mataron tras "una breve resistencia", según la versión facilitada por la agencia oficial argelina, APS.
El fiscal en el juicio de Medea, Alí Sahraoui, advirtió al tribunal que no se trata, "de ninguna manera, de juzgar la fe y las creencias de los acusados", sino "de obtener un veredicto riguroso contra un grupo cuya acción ha causado siete muertos" entre los miembros de los servicios de seguridad.
"Este grupo quería imponer el poder por la fuerza; eso se llama fascismo", manifestó el fiscal, quien añadió que algunos acusados son "iluminados" y otros "ignoran totalmente lo que es el islam".
Para rebatir las peticiones de los acusados de que sea prohibida la prostitución, el fiscal los ha desafiado a mostrar "un sólo texto que legalice la prostitución en la Argelia musulmana, cuya constitución afirma en su artículo segundo que el islam es la religión del Estado".
