Atenas se dispone a convertirse en la capital cultural de Europa durante seis meses
JUAN FERNÁNDEZ ELORRIAGA, Todavía ayer se ignoraba en medios diplomáticos de la capital griega qué miembro del Gobierno español asistirá el día 21 a la proclamación de Atenas como capital cultural de Europa para lo que resta de 1985. A instancias de Melina Mercouri, la actriz de Nunca en domingo, que ostenta la cartera de Cultura en el Gobierno PASOK de Andreas Papandreu, la CEE ha decidido enriquecer desde este año su ritual con la proclamación de una ciudad de Europa como capital cultural del Viejo Continente comunitario durante un año.
El próximo año será posiblemente el turno de Florencia; seguirán Amsterdam y Berlín, quedando París para 1989, bicentenario de la Revolución Francesa. El año 1992 está desierto y podría ser solicitado por una capital española, en conmemoración de los cinco siglos del descubrimiento de América.El presidente francés, François Mitterrand, estará en la Acrópolis el día 21 junto al ministro alemán de Exteriores, Hans Dietrich Genscher, y varíos ministros de Cultura de los países de la Comunidad. Cuando lord Gowrie, ministro británico de Artes, suba a la Acrópolis el viernes no dejará de mirar el friso del Partenón, cuyas esculturas principales siguen en el British Museum y son reclamadas por Grecia.
El día 21 todo Atenas será una fiesta de música, danza y teatro total en sus calles y plazas. El grupo catalán Tricicle ha sido insistentemente invitado, pero no parece responder de buena gana al proyecto de los organizadores griegos de actuar en la calle. Victoria de los Ángeles dará un recital en el teatro de la Acrópolis, el Herodos Aticus, el 16 de septiembre, seis días antes de que al pie del Partenón actúe la Sinfónica de Washington. Núria Espert pondrá por esas fechas su Salomé en Atenas.
Versos de Esquilo
A las 20.45, seis minutos antes de la puesta del sol, François Mitterrand colocará al pie de la Acrópolis una placa conmemorativa del acontecimiento con unos versos de Esquilo. A continuación, los invitados asistirán, en el Ágora de Atenas, a una cena en su único edificio reconstruido, la Stoa. Allí, el presidente griego, Sarchetakis, pronunciará un discurso. Seguirá un festín entre coros y danzas con un tema de Aristófanes. Poco después se lanzarán fuegos artificiales.
El ministro de Cultura francés, Jack Lang, y Melina se proponen desarrollar la colaboración cultural europea multilateral "porque sería una pena que nuestro viejo continente quedara reducido a la Europa de la patata y el pepino", declaraba a este periódico Mihail Kutuzis, un hispanista que se ha convertido en el alma del festival y no ha abandonado el aire bohemio que muchos ministros socialistas griegos de hoy tenían durante la oposición. "Europa se enfrenta al desafío de millones de horas de programas televisados que, de seguir así las cosas, para el año 2000 serán mayoritariamente estadounidenses. Tenemos que hacer que Europa siga siendo exportadora de bienes culturales".
