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Mercenarios procedentes de Suráfrica intentaron derrocar al régimen socialista de las islas Seychelles

Un intento de golpe de Estado contra el régimen socialista moderado de las islas Seychelles fracasó ayer. Un grupo de 47 mercenarios procedentes de la República Surafricana -que habían invadido la isla de Mahe, la principal del archipiélago-, regresó a Suráfrica en un avión indio secuestrado tras el fracaso de la intentona. Todos se encuentran detenidos, según han informado las autoridades de Pretoria. Otro grupo de invasores se ha refugiado en las montañas de la isla. El jefe de policía, James Pilley, ha declarado que parte de los invasores llegó por vía aérea al aeropuerto de Pointe Larue, en Victoria, capital de la isla de Mabe, se apoderaron de la torre de comunicaciones y tomaron rehenes.

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El comando, del que formaban parte dos mujeres, llegó en un avión Fokker, procedente del vecino país de Swazilandia. Otro contingente de unos cincuenta hombres había entrado en el país como turistas en días anteriores.El Gobierno de las Seychelles, que preside Albert Rene, no ha acusado formalmente a ningún país de estar tras el compló, aunque un periódico de Johannesburgo, el Star, afirmaba anoche que los mercenarios eran todos surafricanos, de entre 20 y 30 años de edad, y habían sido reclutados hace semanas en esta ciudad con dinero norteamericano. A cada uno se le ofrecieron mil dólares por alistarse a la expedición y diez mil más si triunfaba el golpe.

El periódico surafricano afirma que los comandos eran ex miembros de elite de los ejércitos de Rodesia y Africa del Sur. Un antiguo mercenario del Congo, el coronel Mike Hoare, fue el encargado de reclutarlos.

El tiroteo en el aeropuerto de Victoria comenzó en el mismo momento en que la policía de las Seychelles descubrió que el grupo de aparentes turistas llevaba armamento moderno. Según un comunicado oficial del Gobierno seychellés, la situación está bajo control, aunque un pequeño grupo de invasores, "que no representa ningún peligro", ha conseguido huir a las montañas. El toque de queda está en vigor en el archipiélago.

El secuestro del avión

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Fracasada la intentona, un grupo de 47 mercenarios secuestró a punta de pistola un Boeing 707 de Air India, que hacía la ruta Seychelles-Bombay y se encontraba en el aeropuerto de Port Larue, y obligaron a su piloto a dirigirlo a la ciudad surafricana de Durban. Allí fueron liberados pasajeros y tripulación, más de 70 personas, y detenido el comando. Según informaciones oficiales surafricanas, uno de los mercenarios llegó muerto a Durban, y otros dos, heridos. El grupo fue trasladado en avión militar a una base aérea próxima a Pretoria para su interrogatorio.El Gobierno surafricano ha dado plenas garantías al indio con el que no mantiene relaciones diplomáticas, de devolución inmediata del aparato con los desperfectos reparados y juicio de sus secuestradores conforme a las leyes internacionales.

En Londres, el ex presidente de las Seychelles James Mancham, derrocado en 1977 por el actual dirigente, el socialista Albert Rene, ha declarado que conocía desde la víspera la intentona y que se le había pedido su apoyo. Precisó que había recibido una llamada anónima de un hombre que hablaba en la lengua vernácula de las Seychelles pidiéndole que "apoyara el movimiento en marcha". Mancham respondió que "no estaba interesado en el poder por el poder", pero se manifestó dispuesto a regresar a las islas "si fuese necesario, ya que un ejército de 1.500 hombres oprime al pueblo".

El editor del diario semioficial seychellés The Nation, Gilbert Confait, ha declarado que cuando se proceda al interrogatorio de los mercenarios detenidos "se sabrá quién está detrás del golpe". El Gobierno del presidente Albert Rene todavía no ha formulado ninguna acusación oficial.

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