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Cubanos anticastristas asesinaron en Washington a Orlando Letelier

El asesinato del ex ministro chileno Orlando Letelier fue muy probablemente cometido por un grupo de cubanos anticastristas exiliados en Norteamérica, que trabaja en estrecho contacto con la policía política del régimen de Pinochet.

Los primeros indicios de esta conexión cubana en el asesinato del destacado miembro de la oposición democrática chilena aparecieron en el curso de las indagaciones que lleva a cabo la Oficina Federal de Investigación (F111), según reveló ayer el diario The Washington Post. Orlando Letelier, 44 años, ex embajador en Estados Unidos y ex ministro de Defensa y de Asuntos Exteriores del Gobierno de Salvador Allende, fue asesinado en Washington el pasado 21 de septiembre. Una bomba hizo explosión en el coche de Letelier cuando éste circulaba por la plaza del General Sheridan, a sólo unos metros de donde tiene su sede la embajada chilena.

Letelier, que trabajaba y residía en Washington, había desarrollado uña ' gran actividad política tendente a unificar a los grupos de la oposición chilena, así como a presionar en el Congreso norteamericano para impedir la concesión de créditos o ayuda al régimen militar que derrocó, en septiembre de 1973, al Gobierno constitucional de Salvador Allende.

Durante las dos últimas semanas, seis cubanos exiliados, pertenecientes a un grupo anticastrista llamado Brigada 2506, fueron citados a declarar ante un gran jurado federal en relación con el asesinato de Letelier. La Brigada 2506, con sede en Miami y compuesta por unos ochocientos miembros, es una organización de veteranos de la fallida invasión de Cuba en la bahía de los Cochinos, en 196 1.

La Brigada 2506 fue uno de los grupos que tomó parte en la formación de la CORU (Coordinación de Organizaciones Revolucionarias Unidas), que dirige Orlando Bosch, actualmente detenido en Venezuela a causa de su presunta ¡m* plicación en el atentado terrorista contra un avión de'línea regular cubano que costó la vida a ,71 personas en octubre pasado.

La conexión entre grupos terroristas del exilio cubano y la policía política chilena (DINA) fue revelada en noviembre pasado por el diario The Miami Heral4 que atribuyó su información a un dossier secreto facilitado a la FBI por la policía venezolana. Según aquel informe, la DINA intentó que Rolándo Otero y Orlando Bosch asesinaron en Costa Rica a Andrés Pascal y Allende, sobrino del presidente derrocado y muerto en 1973, y destacado militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (M IR) chileno.

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. La vinculación entre los grupos anticastristas y la policía secreta de la dictadura chilena no tendría gólomotivaciones económicas, sino también políticas. Al sentir que su causa está siendo abandonada por el Gobierno norteamericano y que la normalización de relaciones entre Washington y La Habana puede ser pronto una realidad,, algunos activistas cubanos habrían vuelto su mirada hacia el régimen de Pinochet, al que consideran un bastión del anticomunísmo en América latina.

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