Aguirre se pregunta qué hubiera ocurrido de profanarse una mezquita

La presidenta madrileña, Esperanza Aguirre, no ha querido esta mañana valorar si la detención de cuatro jóvenes que presuntamente asaltaron una capilla de la Universidad Complutense era exagerada, como consideró ayer el rector, Carlos Berzosa. "No estoy aquí para juzgar a la policía y los jueces", ha dicho, para añadir que no ha visto "el acto de estas señoras que se desnudan de cintura para arriba". "Pero si se hubiera hecho en una mezquita hubiera sido motivo no sólo de detención, sino de algo gravísimo", ha sentenciado.

El incidente ocurrió el pasado jueves 10 de marzo, cuando unos 50 jóvenes irrumpieron en una capilla del campus de Somosaguas de la Complutense, donde estaba el párroco y unas alumnas rezando, para protestar contra la Iglesia. En el acto, tildado por el Arzobispado de Madrid de "profanación" y de "performance reivindicativa contra el sistema patriarcal y el poder de la Iglesia" por sus autores, se corearon consignas como "Contra el Vaticano poder clitoriano" o "Menos rosarios y más bolas chinas". Además, dos chicas se desnudaron de cintura para arriba y se besaron en el altar.

"Su segunda legislatura ha sido lamentable"

Este incidente ha provocado la apertura de un expediente a los alumnos, una denuncia por parte del pseudosindicato Manos Limpias, una misa de desagravio en el oratorio, la detención de cuatro jóvenes, tensión en las universidades y un intenso debate, abierto por Berzosa, sobre la conveniencia o no de que haya templos en los campus universitarios públicos, además de furibundas críticas contra el propio Berzosa.

Tras el comité de dirección del PP de Madrid, celebrado en Boadilla del Monte, Aguirre también ha atacado la labor del rector Berzosa como ya hicieran Francisco Granados -que hoy ha vuelto a exigir su dimisión por su "nefasta gestión"- e Ignacio González. "Su segunda legislatura ha sido lamentable", ha afirmado. Según la presidenta regional, el todavía máxima autoridad de la Complutense ha demostrado su "sectarismo" al frente de la universidad. "Ya no va a seguir siendo rector, le quedan 15 días escasos", ha agregado. El 6 de abril se celebran elecciones a rector, a las que no se presenta Berzosa.

Ante estas declaraciones, el secretario de Política Institucional de CC OO de Madrid, Jaime Cedrún, ha exigido al Gobierno regional que "deje de atacar a la Universidad Complutense de Madrid, ponga fin a las ingerencias institucionales y respete la autonomía universitaria para resolver los conflictos que se producen en el campus como el de la capilla".

En los micrófonos de la cadena SER, Berzosa denunció haber recibido "muchas presiones" para denunciar a los estudiantes. "Estoy recibiendo un acoso que no tiene sentido y no es grato. Es un desprecio a la autoridad académica y universitaria muy grande. Hay un acoso realmente tremendo hacia mí", agregó, al tiempo que calificó los arrestos de "desmesurados". A su juicio, "no hacían falta". Los cuatro jóvenes se enfrentan ahora al expediente abierto por la universidad, que puede acabar en expulsión, y a la denuncia de Manos Limpias contra los sentimientos religiosos, que puede ser penada con cárcel. Hoy, por primera vez, ha hablado uno de ellos. Entrevistado por EL PAÍS, Héctor Meleiro, de 21 años asegura que no participó en el acto pero sí lo respaldo: "Comparto todo lo que se hizo porque, según me han contado los que estuvieron, la acción fue impoluta. En ningún caso se profanó". Meleiro sostiene que hay tres alumnas más que esperan ser llamadas a declarar.

Después la cacerolada de ayer en la Complutense contra las detenciones y en defensa de la universidad sin templos, diversos colectivos han convocado para el viernes un acto "de desagravio laico", a las 18.00, en la Biblioteca Histórica Marqués de Valdecilla de la Complutense. Participan, entre otros, el actor Leo Bassi o el cantautor Javier Krahe. Madrid alberga el doble de capillas que las demás universidades públicas de toda España juntas.