_
_
_
_

Cuando música rima con filosofía

Un festival reúne en Murcia a 40.000 asistentes a debates y conciertos

A las doce de la mañana del sábado, en el festival Estrella Levante SOS 4.8 de Murcia, que celebra su segunda edición, los conciertos de la noche anterior han terminado hace pocas horas. No había sido un cartel cualquiera, estaban The Prodigy, Peaches y PJ Harvey & John Parish entre otros. Seis personas duermen a pierna suelta sobre una obra del artista y comisario Jota Castro en el espacio dedicado a la exposición colectiva de arte dentro del recinto del festival. Castro está encantado, se trata de unas colchonetas hechas con material reciclado (compresas y pañales). La imagen de los festivaleros derrengados por el baile tumbados sobre una obra de arte reciclada es la materialización de la intención del evento: hablar de la sostenibilidad a través de las artes plásticas, la filosofía y la música.

Glucksmann, Ball, Onfray y Pistoletto discutieron sobre sostenibilidad y arte

SOS 4.8 ha reunido este fin de semana a 40.000 personas. Muchos de los asistentes a los conciertos no eran conscientes de que se movían bajo el lema de la sostenibilidad, directamente obviaban la parte de la programación que iba de las diez de la mañana hasta las tres de la tarde e incluía debates y conferencias de André Glucksmann, Michel Onfray, Michelangelo Pistoletto o Philip Ball. El plantel de pensadores, aunque consciente de estar eclipsado por el de músicos -Maxïmo Park, Duffy, Keane o The Matthew Herbert Big Band-, se encontraba a sus anchas en una situación poco convencional.

"Siempre es bueno sacar los discursos filosóficos de los lugares tradicionales", dice el científico y divulgador Philip Ball con optimismo. Acaba de hablar para un íntimo auditorio de unas 35 personas sobre su libro Masa crítica, en el que reflexiona sobre comportamientos de las sociedades, desde los atascos hasta las fusiones empresariales, y la posibilidad de que estén regidos por leyes parecidas a las de la física. Para seguir su charla, que se remonta a Hobbes, hay que tener las neuronas prontas. El público es escaso, pero responde. Es además el adecuado para cambiar opiniones con el científico sobre los comportamientos de la masa, algunos de ellos vociferaban los temas de The Prodigy la noche anterior junto a otros miles.

El artista italiano Michelangelo Pistoletto camina por el recinto esquivando grupos de veinteañeros sin camiseta y cúmulos de vasos de plástico vacíos y otros desperdicios escasamente biodegradables que desafían el lema del festival con su presencia. Algunos le observan con una curiosidad no correspondida por el artista, que, a pesar de sus 75 años, está acostumbrado a trabajar con gente joven y disfruta del ambiente precisamente por su carácter heterogéneo. "Igual que en mayo del 68 hubo una comunión entre las artes, ahora el artista debería estar en contacto con la política, la ecología, con todos los ámbitos de la sociedad", explica el que fue uno de los padres del arte povera. Durante el tiempo que ha durado el debate en el que ha participado se ha obrado la milagrosa mezcla. Público y participantes han discutido sobre la crisis, la inmigración y el arte contemporáneo formando un caótico batiburrillo intelectual en italiano, inglés y español en medio del cual un micrófono circulaba de mano en mano.

Los asistentes a los conciertos no son del todo ajenos a las actividades extramusicales. De hecho, la exposición colectiva comisariada por Jota Castro está bastante concurrida.

El responsable achaca el éxito al silencio y la luz roja y envolvente que convierte el espacio de la muestra en un refugio para quienes quieren descansar del sol y el ruido. A estos visitantes los recibe, escrita en la pared, una versión rabiosa y macarra del "conócete a ti mismo" délfico: "No te mueras tonto". Es el primero de una serie de consejos con los que se recoge el espíritu de la muestra y que se dirigen al público de los conciertos, al auditorio de los debates y a cualquier viandante del siglo XXI con ojos para leer: "Intenta no consumir durante todo el día. Recuerda que eres un problema en movimiento. Entiende tu pasado y reutilízalo. Lee, escucha y habla".

Michelangelo Pistoletto, Jota Castro y Philip Ball, de izquierda a derecha, en el festival SOS 4.8.
Michelangelo Pistoletto, Jota Castro y Philip Ball, de izquierda a derecha, en el festival SOS 4.8.JORDI VIDAL

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_