Las mujeres de Almodóvar llegan a Broadway

Fue noche de lluvia y de estreno en Broadway. La producción inspirada en la película de Pedro Almodóvar "Mujeres al borde de un ataque de nervios" debutó ayer en el Teatro Belasco de Nueva York de la calle 44. El musical llegó a este escenario sin el tradicional paso de este tipo de funciones por escenarios menores, un proceso que a menudo permite ajustar determinados detalles siguiendo los dictados del público en la primera gira, antes de llegar a Broadway. El musical de Mujeres no lo hizo debido al complicado del montaje, el riesgo anoche por tanto, ha sido alto. Almodóvar expresó a la salida su satisfacción con el montaje. ¿Le afectará la crítica que reciba el montaje? "Tengo cierta distancia, pero por ellos, los que lo han trabajado, me gustaría que les fuera muy bien", dijo el director.

Esta mañana la crítica del New York Times recomendaba que estas mujeres tomaron Ritalin y no valium, para conseguir calmar su hiperactividad y déficit de atención. "Repleta de talento y creatividad y con un reparto que brilla con varios Tony Awards, Mujeres al Borde de un ataque de Nervios es una triste víctima de su propia mente dispersa", escribe Ben Brantley. "Uno podría argumentar (si se sintiera generoso) que "Mujeres" simplemente refleja el temperamento de los inquietos, insatisfechos personajes, que siguen buscando el amor en lugares equivocados".

Apenas dos horas antes Almodóvar, a las puertas del teatro ante más de una decena de cámaras y periodistas, decía sentirse "como una madre". Aunque no ha participado directamente en la producción, ha seguido de cerca la evolución de este proyecto que ha tardado tres años en gestarse. Asistió a varios talleres y ante la insaciable curiosidad de Sher, el director -una estrella de Broadway responsable entre otras producciones de la exitosa South Pacific- acabó por ofrecer un visionado de la película en la habitación de su hotel. Reapsaton escena por escena y Almodóvar les fue explicando sus intenciones, Tras el estreno en Broadway, vestido con un traje gris, gafas de sol y un jersey verde seco de cuello vuelto, dijo sentirse "emocionado". En la función dijo haber visto a "cinco reinas de Broadway en acción".

La obra arranca con un telón en el que aparece una receta de gazpacho con manchas de tomate. El personaje de Pepa, interpretado por Sherie Rene Scott , duerme en una cama cuyo reflejo se proyecta en un espejo que hace las veces de techo y que más adelante pondrá en llamas. El conductor del Mambo Taxi salta entonces a escena y entona el primer número, un canto de amor a la ciudad de Madrid. "Me ha emocionado que la primera canción en este musical, interpretado en inglés y absolutamente americano, fuese este canto a la ciudad", dijo Almodóvar a la salida. Las referencias a la España de los ochenta en este montaje son constantes, en algunos siguen la película original y en otros ayudan a ambientar escenas nuevas: desde el taxi, plagado de revistas de la época, hasta el personaje que en la película interpretó Rosy de Palm El País, las antiguas cabinas de teléfono, los guardia civiles o las fotos de la Gran Vía proyectadas al fondo del escenario. "En el montaje hay una reflexión sobre la estética de todas mis películas de la década de los ochenta", reflexionó Almodóvar tras la obra. El vestuario de la nueva versión de Broadway también hace varios guiños literales a la película original.

Más allá de los detalles, el libreto incluye frases traducidas directamente del guión diseminadas a lo largo de la obra, e incluso se muestra un clip grabado con el logotipo de la cadena 2 de TVE que simula un cameo de la madre de Almodóvar. Pero el musical también añade nuevas escenas a esta versión cantada y en inglés de la película. Hay ciertos giros al guión, cambiando el escenario de la penúltima escena de un aeropuerto a un juzgado, incorporando una canción que interpretan el amante que ha abandonado a Pepa y su hijo. "En comedia el tempo es fundamental y el ritmo de esta obra y la manera que tienen de hablar representa muy bien la película", señaló Almodóvar. ¿Sufrirá con lo que diga la feroz crítica estadounidense? "Tengo cierta distancia, pero por ellos, los que lo han trabajado, me gustaría que les fuera muy bien". En la segunda planta del Hotel Millenium, con los nervios des estreno superados, se celebró la fiesta que dura hasta cerca de la media noche. A la entrada frente a una nube de fotógrafos Almodóvar y la troupe engalanada de Broadway brindaron con gazpacho.