Muere Isabelle Caro, la modelo anoréxica de Toscani
La modelo francesa protagonizó una campaña de Benetton
Isabelle Caro posaba sonriente en todas las fotografías de los dos blogs que escribía. En uno de ellos contaba su historia, su vida, su calvario al que llamaba Anna: la anorexia. Sonreía pese a su 1,65 de estatura y los 31 kilos de peso con los que saltó a la fama gracias a una campaña publicitaria. Con 28 años, su muerte, conocida este miércoles, se produjo el 17 de noviembre, según confirmó su amigo y cantante suizo Vincent Bigler. Las causas del fallecimiento no han sido confirmadas, aunque la misma fuente aseguró que había estado hospitalizada por una complicación pulmonar y que se encontraba muy fatigada.
Enferma de anorexia desde los 13 años, la modelo francesa se dio a conocer en 2007 a través de una campaña publicitaria de la firma de ropa Benetton que pretendía concienciar sobre el horror de esta dolencia.
El autor de las instantáneas era el siempre polémico Oliviero Toscani, conocido también por retratar a un enfermo de sida agonizando, o a un condenado a la pena de muerte. Aquellas imágenes de Isabelle desnuda, todo huesos, dieron la vuelta al mundo y fueron censuradas en países como Italia por "violar los artículos del código de la lealtad publicitaria y las convicciones morales, civiles, religiosas y de dignidad de las personas".
Lola Galán transcribe en un artículo publicado en EL PAÍS en 2007 algunas de las descripciones que Caro hacía en su blog. Su dieta consistía en un poco de líquido, algo de chocolate y dos pastelitos de fresa. "Esperaba con impaciencia a que llegaran las cinco de la madrugada, hora a la que me concedía el derecho a beber por fin unos tragos de coca-cola Light y mis dos tacitas de té, que degustaba en una suerte de ritual eufórico, con la ayuda de la cucharilla más pequeña que pude encontrar en el mercado". Se consideraba "víctima de una secta" de la que ella misma era el "gurú". "Rechazaba todo deseo, todo placer; nociones prohibidas en mi vida, que iba en busca de la perfección de un ideal de pureza".
Para ella la campaña publicitaria había supuesto una liberación y en sus diarios en la Red aseguraba que se sentía capaz de luchar contra la enfermedad. En ellos criticaba sobre todo a los hospitales. En 2006, informa AFP, llegó a estar en coma al alcanzar los 25 kilos de peso. Lola Galán recoge sus reflexiones sobre el paso por una clínica de la región de Hauts-de-Seine: "Querían aislarme del mundo exterior, era el tratamiento de las anoréxicas. No se daban cuenta de que cada caso es diferente". La modelo culpaba de su enfermedad a una madre posesiva que la recluyó de los 4 a los 11 años en un chalet a las afueras de París, donde vivían con su padrastro. Pese a lo dramático de su historia se describía como "una artista, una actriz, una apasionada del teatro, y sobre, todo y ante todo, una enamorada de la vida, de su belleza, y de la riqueza del universo terrestre que nos ofrece la naturaleza", aunque añadía "cada día se me presenta como una lucha permanente contra la anorexia". Una batalla sobre la que ella misma anunciaba sus "progresos". A comienzos de 2010 Caro hacía público que había llegado ya a los 42 kilos. Sus blogs estaban ayer fuera de servicio.
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