Holanda expone los retratos del Siglo de Oro de su pintura

Los retratos suelen ser los cuadros más populares de la pintura por su inmediato poder de atracción. En el siglo XVII, los artistas holandeses trabajaron sin descanso atendiendo a ricos comerciantes y empresarios y a sus gobernantes. Todos ellos posaron encantados para pintores como Rembrandt o el flamenco Frans Hals, que le pusieron así rostro a la sociedad del Siglo de Oro en los Países Bajos. Cerca de 60 telas, entre las suyas y las de otros 25 colegas, han sido reunidas por la Real Pinacoteca Mauritshuis bajo el título de Retratos holandeses: la era de Rembrandt y Frans Hals. Una muestra que refleja la euforia de una burguesía incipiente y estará abierta hasta el 13 de enero de 2008.

Holanda experimentó en el siglo XVII una auténtica eclosión económica que la convirtió en la primera potencia mundial. Para los artistas, ello supuso ver sus talleres llenos de clientes en busca de una pincelada de inmortalidad. Al reunir los 60 cuadros que componen Retratos holandeses, la Mauritshuis, abierta en La Haya, ha compuesto un retablo costumbrista. Los trajes y las joyas, la postura de los modelos, su expresión y hasta los fondos sobre los que aparecen, ilustran una sociedad en ebullición y sus modas.

"Parece mentira que hayan pasado 50 años desde la última recopilación de retratos del siglo XVII holandés. En 1952 hubo una en el Rijksmuseum, pero la nuestra cuenta con una joya. Es el retrato para mí más bello del mundo, el de Jan Six, pintado por Rembrandt en 1654", aseguraba al presentar la exposición Frits Duparc, director de la Mauritshuis. El cuadro pertenece a los descendientes directos del que fuera amigo de Rembrandt, además de alcalde de la capital holandesa, y no se había visto en el último medio siglo.

En perfecto estado de conservación, refleja la familiaridad con que Jan Six debía de tratar al maestro holandés. Parece que acaba de asomarse al taller y está quitándose los guantes para saludarle. En la muestra hay asimismo grandes retratos de grupo y de familias enteras, como la pintada por Nicolaes Maes en 1676 y titulada sólo Retrato de familia.Y hay muchos niños. Algunos van vestidos de gala, como Catharina Hoof y su niñera (1620), de Frans Hals. Las obras cedidas proceden de la National Gallery de Londres, el Louvre, la National Gallery de Washington y la Gemäldegalerie, de Kasel.