Detenido por robar una caja de lápices a Damien Hirst
Si puede antojarse desmedido que Scotland Yard haya detenido a un joven británico de 17 años por robar una caja de lápices, mayor sorpresa depara el valor del objeto sustraído, nada menos que medio millón de libras (572.738 euros). Esa cifra es la diferencia que media entre un simple objeto de uso común y la pieza integrante de una obra de arte firmada por Damian Hirst, titulada Pharmacy, y expuesta en la Tate Britain de Londres este verano. Durante su visita a la muestra, el artista de graffiti Cartrain se llevó el lapicero a su casa, motivado, no por la codicia, sino por el afán de vengarse.
La rocambolesca historia nace de la enemistad que enfrenta a los dos hombres desde que Hirst -uno de los artistas vivos de mayor cotización- denunciara al joven el año pasado por utilizar en unos collages su famosa calavera incrustada de diamantes. Los vendía a un precio modesto a través de su web comercial. La Sociedad de Diseño y Artistas forzó a Cartrain a indemnizarle con 200 libras (229 euros)por violación de los derechos de autor. El graffitero quiso devolver el golpe a Hirst este julio: sustrajo los lápices de la Tate -una serie de la marca Faber Castell que data de 1990- y elaboró un cartel a imitación de los famosos "Se busca" de la policía. El texto que insertó en el póster contenía un ultimátum, algo así como: "Tu lapicero por mis collages, tienes hasta el 31 de julio".
La broma puede salirle cara a Cartrain. A las pocas semanas de su fechoría fue detenido por la policía y hoy está en libertad condicional a la espera de juicio, el próximo viernes.
Babelia
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