Radio, cómicos y compañía en tiempos difíciles

Compañía y humor. Un binomio sencillo y directo que en los últimos años se ha convertido en uno de los pilares de la programación de la cadena SER y que en esta nueva temporada la emisora ha querido reforzar para que los oyentes puedan escapar, aunque sea unos minutos, de la realidad de 2020, con la pandemia y sus consecuencias de por medio. Desde la sensación de los últimos dos años, La vida moderna, con David Broncano, Quequé e Ignatius, a las confidencias e improvisaciones de Silvia Abril y Toni Acosta en El grupo o las de Berto Romero y el último premio nacional de Televisión, Andreu Buenafuente, en Nadie sabe nada, pasando por las secciones humorísticas en programas clásicos de la emisora como Hoy por hoy, La ventana o Carrusel deportivo. Una oferta intensificada por su presencia multiplataforma, en directo (en transistores, ordenadores y móviles) y en diferido (en la web de la SER, en pódcast o incluso en YouTube).

“¿La importancia del humor en la radio? Es la misma que tiene en cualquier otro medio de comunicación, aunque es verdad que la radio tiene un elemento de compañía. Es un medio que te permite hacer otra cosa a la vez, y eso es posible que favorezca la creación de una complicidad que permite que haya una mayor conexión con el humor”, apunta Toni Martínez, director de la sección Todo por la radio del magacín vespertino La ventana. “Acabas siendo una persona que estás mucho tiempo ahí. La radio es una compañía más cálida que otros medios de comunicación”, añade el humorista. El presentador del espacio, Carles Francino, está acompañado también a lo largo de la semana (de lunes a jueves a las 17.00) por cómicos como Especialistas Secundarios, Luis Piedrahita, Javier Coronas, Raúl Pérez, Pilar de Francisco o los integrantes de El Mundo Today.

Como en otros ámbitos creativos, el éxito de los humoristas radica en las historias y en el lenguaje, a lo que se añade el sonido. “Lo que más me gusta es hacer humor con los elementos propios de la radio, no solo el humor verbal, sino todos los sonidos que hay, convertir ese alud de declaraciones que hay cada día, palabras con las que nos desayunamos, en sonidos abstractos. Es decir, la descodificación, la utilización de latiguillos, la utilización de determinados tonos de voz”, recalca Martínez. “Cuando tú lees las declaraciones en un periódico, cuando hablas con el sonido directo de la radio, ese uso tan peculiar del lenguaje en el que se ha convertido la política, en el que el lenguaje muchas veces se usa para distraer la verdad, o disimular lo que uno quiere decir, produce elementos cómicos francamente interesantes”, finaliza el presentador.

“El humor es una actitud ante la vida, y en la radio puede que se dé algo más de intimidad, de radicalidad. Grabamos el programa en un pequeño estudio y eso a veces nos hace pensar que lo que sucede ahí, se queda ahí, con lo que nos lanzamos a cosas muy locas, poco filtro y mucha adrenalina. Siento que doy rienda suelta más que en ningún otro sitio”, cuenta Silvia Abril, que afronta la segunda temporada de El grupo (los viernes a las 03.30). “En la radio siento más libertad. No estás pendiente de la audiencia al día siguiente y hay algo muy casero, te cuelas muy cerquita de la gente mientras hacen otra actividad, mientras conducen, trabajan, cocinan, hacen deporte... tú les acompañas y, si hay suerte, les alegras el día”, añade su compañera de programa, Toni Acosta.

La radio ya no se basa solo en el directo y en un solo canal. El mejor ejemplo es el de La vida moderna, que logró el premio Ondas en 2018, y que tiene una peculiar vida radiofónica: de lunes a jueves se puede escuchar en la app y en la web de la SER a las 19.00, una hora después está disponible en podcast (es uno de los más escuchados en las plataformas) y en YouTube y en la emisora madre en las madrugadas de viernes a sábado y un resumen de lo mejor en la del sábado a domingo. El éxito del programa le llegó precisamente a través de esta oferta multicanal, y a un buen uso de las redes sociales. Quequé por su parte hace doblete en la emisora con La lengua moderna (los lunes a las 19.00 en podcast y plataformas), junto a Valeria Ros

La apuesta por programas específicos de humor se completa en la SER con Andreu Buenafuente y Berto Romero en Nadie sabe nada (sábados a las 12.00), Buenismo bien (disponible en plataformas digitales los viernes y en antena ese mismo día a las 04.00 de la madrugada), con Manuel Burque, Henar Álvarez y Quique Peinado y Las noches de Ortega (los viernes a las 01.30), con Juan Carlos Ortega, que también está presente por las mañanas en Hoy por hoy con uno de sus célebres personajes, Marco Antonio Aguirre, que de lunes a viernes temprano (sobre las 07.45), da su opinión de la actualidad. El programa presentado por Àngels Barceló ha añadido esta temporada (los jueves a las 11.30) una sección que les funcionó bien en verano, Rojo y negro, en la que los humoristas Yonyi y Señor Fox defienden cada uno una postura en un debate de actualidad y los oyentes llaman para posicionarse. Los fines de semana el humor está presente en A vivir, conducido por Javier Pino, que cuenta con cómicos como Antonio Castelo, Quique Peinado, Manuel Burque, Virginia Riezu, Pedro Aznar, Llum Barrera, David Navarro, David Broncano, Javier Cansado, Ignatius y Jorge Ponce. Y también en las horas que dura el Carrusel deportivo. Entre gol y gol el equipo dirigido por Dani Garrido cuenta con Especialistas Secundarios, grupo formado por Íñigo Espinosa, Javier Hernáez y Armand Antoni Anjaumà.