_
_
_
_
_
RECODE 2016

Google se obsesiona con la voz

Sundar Pichai, consejero delegado del buscador, pone todo su esfuerzo en la era postmóvil

Sundar Pichai conversa con el periodista Walter Mossberg.
Sundar Pichai conversa con el periodista Walter Mossberg.Asa Mathat for Vox Media

Google lidera el mundo móvil gracias a Android. La semana pasada respiró con alivio tras ganar el juicio que les enfrentaba con Oracle por el uso del código de Java para crear su sistema operativo. “Podríamos haber seguido adelante sin un veredicto favorable, pero es una gran noticia para todos los que desarrollamos aplicaciones y usamos código de terceros. Es una liberación para la industria del software”, dijo un relajado Sundar Pichai, el CEO de la compañía, en la conferencia  Recode que reúne estos días En Los Ángeles a las mayores figuras de Silicon Valley.

Sin embargo, reconoció que el móvil comienza su ocaso: “Para nosotros hubo un punto de inflexión. Hace tres o cuatro años descubrimos el poder del reconocimiento de voz y la visión por ordenador”. Es consciente de que no va a ser un camino sencillo: “Va a ser algo largo, hace falta mucho entrenamiento, pero comenzamos a movernos pronto. Internamente sabíamos que teníamos que hacerlo”.

El campo de la inteligencia artificial también lo quieren conquistar Amazon y Apple,. Pichai relajó la tensión competitiva: “Esto no es Juego de Tronos. Todos lo hacemos a nuestra manera, pero sí creo que llevamos años respondiendo a dudas”.

A pesar de la pérdida de interés por el móvil, el responsable de la empresa más poderosa de Internet no cree que las pantallas vayan a morir. “No las entierro, pero las pantallas son caras. Hacen falta para algunas cosas, pero la computación y reconocimiento de voz nos ayudará de manera más natural, sin pantalla. Es algo que ya vemos en el coche con toda naturalidad”, matizó.

Pichai, de origen indio, habló de la relevancia de Asia, el gran filón para Android y su deseo por volver a China. Insistió en que Google quiere ofrecer sus servicios en todo el mundo.

Las pantallas son caras. Hacen falta para algunas cosas, pero la computación y reconocimiento de voz nos ayudará de manera más natural, sin pantalla

Pichai intenta mantener el equilibrio entre la investigación y su gran filón, el buscador: “Vemos que la demanda de información no frena. Nos lo piden de diferentes maneras. Ayudamos a la gente a hacer cosas, a resolver dudas, a saber cómo llegar a un lugar”.

El ingeniero no eludió la pregunta sobre dónde están los límites de la privacidad. Un inversor que estaba entre el público en la conferencia de Recode remarcó que estaba preocupado si cedián ante la Unión Europea. Pichai buscó la comprensión tratando de analizar la privacidad con otro prisma: “El año pasado dijimos a la gente que nos dejase organizarles las fotos. Están encantados. Tienes que dar un valor y confianza para que te den ese margen. La privacidad es complicada, pero dejamos que los usuarios entren y modulen qué podemos y qué no podemos saber”. Puso como ejemplo Chrome, su navegador, el más usado en todo el mundo: “Permitimos que se navegue de incógnito. Se puede borrar por completo lo que se hizo en las últimas cuatro horas. Es una cuestión de elección”.

Android está en más de 1.400 millones de aparatos. Samsung se ha convertido en el más beneficiado con este sistema operativo, pero no todos los fabricantes están tan contentos con ello. Pocos son capaces de hacer rentable su apuesta. “Samsung es importante, ha subido el nivel. Pero no podemos tener un solo actor en este campo. Android es un ecosistema abierto. En China a Huawei le va muy bien, por ejemplo”, defendió.

El ejecutivo aprovechó para desmentir los rumores de creación de un móvil propio: “Los Nexus [modelos que sirven como patrón para cada nueva versión del sistema operativo] no los hacemos nosotros. Estamos esforzándonos en que sean tal y como soñamos, pero no vamos a fabricar”.

Durante I/O, su conferencia anual, Google mostró Daydream, su plataforma de realidad virtual. Sin embargo, no mostraron el producto final, capaz de competir con Oculus, de su competidor Facebook. Pichai sostuvo que su complejidad es notable: “Es una gran apuesta, a largo plazo. Necesitamos pensarlo bien desde el principio. No vale cualquier cosa, hay que pensar en el dispositivo, las sensaciones, el control, la transmisión. Queremos hacerlo bien. Como hicimos al principio con Android, estamos sentando las bases de la plataforma”.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_