Lulzsec pliega velas
El grupo 'hacker' anuncia que cesa en su actividad, 50 días después de haber aparecido
El grupo hacker Lulzsec, cuyo emblema es un barco, anuncia que pliega velas. En un comunicado final, recuerda que zarparon hace 50 días "en nuestro humilde barco" en un océano brutal: Internet. 50 días en los que han atacado empresas, Gobiernos y personas por un espíritu caótico y anárquico. El texto explica que detrás del grupo hay personas, seis, con sus gustos por una deteminada música, comida o programas de televsión "como vosotros". La gente de Lulzsec, que siempre ha reivindicado un afán humorístico en sus asaltos, confía en que la revolución prosiga sin ellos. El comunicado termina aconsejando a quien quiera conservar los mensajes del grupo, que abra un sitio espejo porque ellos dejarán de pagar el albergue del suyo.
El anuncio de su autodisolución coincide con una guerra interna de distintos colectivos hackers y la filtración de los mensajes que se cruzaban los miembros de Lulzsec en su chat interno. Sabu sería el alias del líder del grupo y lo controlaría. Estaría persistentemente preocupado por la seguridad del colectivo lanzando avisos cuando observa movimientos inadecuados de otros miembros del mismo. Kayla sería el encargado de suministrar el botnet que se utilizaría para los ataques de denegación de servicio. Un botnet es una red de ordenadores infectados que se controlan remotamente y obedecen al propietario de la citada red. Topiary, por su parte, estaría encargado de la imagen pública del grupo que en Twitter tiene más de 260.000 seguidores. A pesar de dirigir las operaciones de Lulzsec, Sabu no parece participar.
En estos mensajes, el grupo muestra su preocupación por los ataques que ha recibido últimamente. Grupos como WebNinjas o TeaMpOison han manifestado que desean ver al grupo tras las rejas por su insana actividad en Internet en nombre de publicidad, ganancias financieras o una agenda antigubernamental. Topiary, por ejemplo, critica a The Jester, otro de sus enemigos, por su pomposo elitismo destinado a abastecer de "combustible blogger" , pero está preocupado porque es consciente de que él y los otros grupos están siguiéndoles la pista.
Precisamente se supone que ha sido Topiary quien ha hecho unas manifestaciones en Gawker, donde define Lulzsec como expresión de una energía por la vía de cibermateriales maliciosos y divertidos. También niega que el joven detenido en Gran Bretaña sea miembro del grupo. La única conexión es que administraba un chat donde partidarios de Lulzsec se expresaban.
Un grupo, WebNinjas, aseguró la semana pasada haber reunido datos de los chats de Lulzsec y enviado información sobre identidades del colectivo al FBI, la agencia de seguridad británica SOCA e Interpol. "Ahora deben actuar ellos", aseguraron. En el blog se habla de la detención de Ryan Cleary, acusado de haber atacado SOCA. Lulzsec, ironizando sobre esta detención ha escrito: "parece que el glorioso jefe de Lulzsec ha sido detenido... Todo ha terminado ahora... esperen, ¡seguimos aqui! ¿A qué pobre desgraciado habrán cogido?. Mientras tanto, LulzSec publicó información sobre dos hackers identificados como "m_nerva" y "hann" en un mensaje público a los "payasos" del FBI. Acusa a m_nerva de la piratear el juego Deus Ex y aseguran que trata de huir de EE UU. "Estos matones nos pidieron clemencia después de disculparse con nosotros toda la noche por la fuga de algunos de los registros de nuestros afiliados". "No hay piedad en el barco Lulz". Entre los datos que suministran figuran direcciones postales y de Internet. En este contexto, BitCoin, sistema de moneda virtual empleado por Lulzsec, sufrió un ataque y la cotización de la misma cayó casi a cero después de que se lanzaran cantidades de bitcoins falsos. Las transacciones quedaron suspendidas.
Estos últimos días Lulzsec había anunciado acciones conjuntas con Anonymous después de que el 12 de junio, lanzara un mensaje donde marcaba claramente sus diferencias con el otro colectivo hacker: "Si quieres ética ve a llorar a Anonymous. Los verdaderos lulzfans esperan el siguiente día para tener más diversión".
En el denso historial de estos 50 días hay desde ataques al Senado de EE UU y a una web de la CIA al robo de cerca de 180 contraseñas de miembros de una organización en Atlanta dedicada a la ciberseguridad y que trabaja para el Gobierno de EE UU. Una de sus últimas acciones ha sido el asalto, con robo de datos, a la policía de Arizona por la política inmigratoria del Estado. La industria del videojuego, empezando por Sony, ha sido otra de sus víctimas seleccionadas.
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