"Compré mi primer ordenador para mi asistenta, ahora es empresaria y no trabaja más para mí"

Cree en la tecnología pero desconfía de ella, la usa pero "sin llegar al vicio" y la adquiere siempre que respete la naturaleza. En un discurso en el que juega con el humor y la gravedad, el popular artista brasileño Carlinhos Brown retrata los beneficios del desarrollo tecnológico sin olvidar las graves consecuencias que su uso irresponsable acarrea al medio ambiente.

"Empecé teniendo una calculadora. Luego compré mi primer ordenador. Fue para mi asistenta, ella se convirtió en una gran empresaria, somos grandes amigos pero no trabaja más para mí", rompe el hielo el tamborero de Salvador de Bahía, para quien los ordenadores deberían evolucionar hacia un concepto virtual, "que simplemente digas 'venga' y aparezca lo que quieres".

Tímidamente, si es que se puede hablar de timidez en Brown, confiesa que no usa internet, "pero intento leer los e-mails que recibo a diario", afirmación que, entre risas, niega inmediatamente: "En realidad es humanamente imposible responder. Me llegan diariamente unos 1.500 correos electrónicos, responderlos sería un orgullo pero no haría nada más. Así que ya sabéis, si me mandáis un e-mail sabed que la respuesta estará en vuestro corazón, siempre la respetaré", bromea de nuevo Carlinhos.

El artífice de la "batucada de sensaciones" usa teléfono móvil desde hace muy poco tiempo: "Antes del carnaval de Barcelona no utilizaba móviles, tenía miedo? La gente decía que te entraba cáncer", explica el cantante sembrando, por su tono humorístico, la duda sobre la veracidad de su frase, y añade: "Pero luego vi que todo el mundo hablaba por la calle y me compré uno". Y es el móvil el que le da pie a sus críticas hacia el desarrollo tecnológico sin compromiso: "La gente tendría que tener conciencia de que todos los días se fabrican modelos nuevos de teléfonos móviles mientras que existen graves problemas sobre los que apenas se investiga como la forma de reciclar todas las basuras que resultan de las nuevas tecnologías. Estamos viciados con la estética."

"Seriamente hablando", anuncia su giro Carlinhos, "necesitamos una tecnología no contaminante porque toda la energía que consumimos está machando el planeta. La Tierra está clamando que inventemos urgentemente algo para protegerla". Y no le pasan tampoco inadvertidos lo perjuicios que los nuevos medios provocan a la música: "No tengo iPod porque es una herramienta que no respeta la obra musical".

Carlinhos Brown acaba de publicar A gente ainda nao sonhou, en el que deja atrás el sonido de María Caipirinha y evoluciona hacia un nuevo estilo ya palpable en su nuevo single, Garoa.