Baloncesto callejero y actitud

Las patinadoras californianas se pasean perezosas por el paseo marítimo. Tus colegas, sentados en las gradas, atruenan la cancha con el rap de sus loros. El aro enmarca el cielo azul de Venice Beach. Driblas, haces un molinillo de breakdance, das tres pasos, saltas, pirueta en el aire y machacas. Tu marcador y tu credibilidad acaban de subir a la par. También tu ego. En el baloncesto callejero la cosa no va de participar en el espíritu del equipo, sino de dejar a los demás boquiabiertos. Reputación y estilo, el credo de NBA Street V3.

La nueva entrega de Electronic Arts introduce el concurso de mates, esencia de este deporte, y gracias al Trick Stick el jugador puede realizar asombrosos combos con un simple toque del control analógico derecho. Los trucos, los combos y las acrobacias desencadenan enloquecidos Gamebreakers, puntos que pueden cambiar, con un solo tiro, el curso de un partido.

Las canchas y los jugadores (también chicas) se pueden personalizar al detalle, con más de mil elementos intercambiables, de la potencia al peinado. También se puede optar por el máximo realismo, escogiendo localizaciones reales como la mencionada Venice Beach. En el catálogo de jugadores disponibles se incluyen casi todas las leyendas de la NBA; del metro setenta escaso de Spud Webb, hasta los casi dos metros veinte de Kareem-Abdul Jabbar. De regalo, hay cameos como el de los mismísimos Beastie Boys que además de aparecer en la banda sonora (muy hip-hopera) pueden saltar a la cancha para contradecir a aquella película que afirmaba que los blancos no la saben meter.