La nueva era de los 'weblogs'

David Davies acudió hace casi dos años a un partido de fútbol de la Liga inglesa entre el Aston Villa y el Ipswich Town. A diferencia de otros aficionados, Davies no sólo pretendía pasar un buen rato viendo a su equipo, sino también retransmitir el encuentro desde la grada. ¿Cómo? Con un teléfono móvil y unos cuantos mensajes SMS.

Los weblogs, o blogs, son diarios electrónicos en los que sus autores publican comentarios, imágenes y enlaces de los sitios de su interés. La principal diferencia entre estos boletines y las páginas web convencionales es que no es necesario tener conocimientos técnicos para publicar en un weblog. Sitios como Blogger.com, Livejournal.com o Radio.userland.com proporcionan a los internautas las herramientas necesarias para publicar información electrónica sin necesidad de saber HTML, el lenguaje informático con que se escriben las páginas web.

Este modelo de publicación, que comenzó en 1998, ha supuesto la entrada en Internet de mucha gente que permanecía al margen por no tener conocimientos técnicos, y gracias a este formato hoy pueden encontrarse en la Web cientos de miles de weblogs dedicados a los asuntos más dispares. Información, imágenes y comentarios elaborados por aficionados y especialistas en las más diversas materias son publicados a diario en la Red y consultados por internautas de todo el mundo.

Desde el móvil

A comienzos de 2001, nació un servicio que permitía publicar información en un diario electrónico desde un teléfono móvil. Un mensaje corto (SMS, Short Messaging Service) enviado a un número de teléfono redirigía el texto al weblog del propietario, donde aparecía publicado pocos segundos después.

Este nuevo sistema, el mismo que utilizó David Davies para retransmitir el partido de fútbol, recibió el nombre de SMSblog o phlog (Phone log) y supuso la combinación de la movilidad de los teléfonos con la universalidad de la publicación en web. También significó que, a partir de entonces, los internautas no tendrían que sentarse delante de un ordenador para actualizar su boletín electrónico, sino que podrían publicar desde cualquier sitio con cobertura celular.

Si David Davies, el improvisado periodista SMS, decidiera ahora retransmitir un partido de fútbol equipado con uno de estos teléfonos, su phlog no sólo sería capaz de mostrar el texto del marcador y cualquier otro comentario sobre el encuentro, sino también imágenes de los goles y el sonido ambiente del estadio, entre otras cosas.

Esta posibilidad no sólo abre nuevos caminos para la comunicación electrónica, sino que aporta más argumentos a los que piensan que los weblogs y sus hermanos pequeños, los phlogs, se convertirán a medio plazo en una dura competencia para la prensa tradicional.