Boaventura de Sousa se disculpa por “comportamientos” machistas del pasado pero niega “hechos graves”

Casi dos meses después de que varias antiguas investigadoras acusasen al sociólogo portugués Boaventura de Sousa Santos de acoso sexual, el académico ha difundido un artículo donde pide disculpas genéricas por haber tenido en el pasado algunas actitudes “inapropiadas” hacia algunas mujeres. “Pertenezco a una generación en la que el comportamiento inapropiado, si no sexista, ya sea a través de la convivencia o del lenguaje, era aceptado por la sociedad”, señala en un texto enviado a varios medios de comunicación, entre ellos EL PAÍS. “Reconozco que en ciertos momentos pude haber sido protagonista de algunos de estos comportamientos. En ese sentido, lamento que algunas personas hayan sufrido o sentido malestar y por esto les debo una explicación”, añade. El tono de este artículo contrasta con el de su primera respuesta tras difundirse las acusaciones, donde acusó a una de las mujeres de calumniarle y difamarle.

El sociólogo admite haber protagonizado actitudes sexistas, pero niega haber protagonizado los más graves que le atribuyen algunas mujeres como la activista argentina Moira Millán, que le acusó de abalanzarse sobre ella en su apartamento, o la diputada brasileña Bella Gonçalves. “Este reconocimiento no implica en modo alguno que asuma la práctica de los graves hechos de los que se me acusa y nunca dejaré de defender la dignidad y la integridad que he construido a lo largo de más de 50 años”, esgrime.

Cinco mujeres han acusado al antiguo director del Centro de Estudios Sociales de Coimbra, una institución de gran prestigio académico fundada por De Sousa, de aprovechar el cargo para acosar sexualmente a varias investigadoras y una conferenciante. El asunto salió a la luz en el libro Sexual Misconduct in Academia: Informing an Ethics of Care in the University (Mala conducta sexual en la academia: sobre una ética del cuidado en la universidad), editado por Routledge, donde tres antiguas investigadoras, Lieselotte Viaene, Catarina Laranjeiro y Miye Nadya, publicaron un artículo que describía el ambiente de abuso de poder y acoso sexual en el CES. Aunque ellas no concretaban los nombres de la institución ni del sociólogo, enseguida fueron identificados.

Además de Moira Millán y Bella Gonçalves, otras tres mujeres han contactado con la abogada brasileña Daniela Felix para denunciar que también sufrieron acoso sexual del profesor portugués. Tras salir a la luz las denuncias, el Centro de Estudios Sociales de Coimbra anunció que apartaba provisionalmente a Boaventura de Sousa del cargo de director emérito, así como al investigador Bruno Sena Martins, que también podría estar envuelto en casos de acoso sexual, según el artículo de Viaene, Laranjeiro y Nadya. El sociólogo, sin embargo, asegura que fue él quien decidió renunciar temporalmente a su cargo mientras no finalice la investigación.

La institución también anunció la creación de una comisión independiente para investigar las denuncias, pero, un mes después de que se hiciesen públicas, seguía sin formalizarse. El director del CES, António Sousa Ribeiro, reconoció que el proceso estaba resultando “bastante más lento” de lo que preveían, en declaraciones al diario Público.